Conmoción y, a la vez, confusión, generó en las últimas horas una bala perdida que impactó en un niño de nueve años, quien debió ser intervenido quirúrgicamente a raíz del episodio, registrado el viernes por la tarde en Puerto Iguazú.
Fuentes del caso informaron que minutos después de las 19 arribó al Hospital SAMIC el pequeño, en compañía de su padre, con un balazo en la pierna derecha.
Ante los médicos -y luego ante la Policía- el progenitor relató que se encontraba junto al pequeño en su vivienda del barrio Libertad cuando escucharon un estampido. Segundos después, el menor comenzó a sentir dolor. Descubrieron entonces que había sido impactado por un proyectil.
Las primeras pericias y la recolección de testimonios realizada por efectivos de la Unidad Regional V permitió determinar que el balazo provino de la zona costera del río Paraná. Se investiga ahora si el mismo guarda relación con contrabandistas o con algún otro hecho de características también ilegales.
El pequeño debió ser intervenido quirúrgicamente. Los médicos constataron entonces que las lesiones no comprometieron arterias ni partes óseas, y que las lesiones finalmente fueron leves. La Policía busca datos para dar con el irascible pistolero.
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