BUENOS AIRES (DyN). El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, reclamó otra vez una reunión a la presidenta Cristina Fernández, para discutir una agenda de trabajo conjunto y “no para que nos pongamos de novios”, en medio de un agravamiento del conflicto entre la Nación y la Ciudad.La frase fue pronunciada en momentos en que crece la tensión entre ambos distritos, luego de que la Policía Federal fuera a buscar ayer por la fuerza al jefe del organismo porteño Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (Sbase), Juan Pablo Piccardo, para que participe de una audiencia paritaria por los salarios de los empleados de ese medio de transporte.La declaración fue pronunciada mientras desde el kirchnerismo siguieron los ataques contra el jefe de Gobierno, principalmente de parte del senador y ex jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, quien no dudó en decir que “no tiene respeto” por el líder del PRO y que “si a la Ciudad no la fundió Macri no la funde nadie”.La vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, y el procurador general de la Ciudad, Julio Conte Grand, y el propio Piccardo rechazaron en duros términos el incidente con la Policía.Luego, el jefe de Gobierno renovó las críticas contra el oficialismo nacional y contra Cristina Fernández: “Nos gustaría que la presidenta deponga esta actitud y nos llame. Yo no voy a ser kirchnerista y no pretendo que ella se haga del PRO ni nos pongamos de novios, sino que trabajemos por la gente”, aseguró.En declaraciones a radio Mitre, Macri se quejó de que, desde la Casa Rosada, “nos quieren imponer de prepo” responsabilidades como el manejo del subte, pero “estamos acá para bancarla y por suerte no estamos solitos. Hay un sistema judicial” en el cual “no todo está manejado por el kirchnerismo”.Sin embargo, se conoció que la jueza en lo Contencioso Administrativo Federal Rita Ailán rechazó un recurso de amparo que la Ciudad había presentado contra la decisión del Ministerio de Seguridad de la Nación de retirar a la Policía Federal de los subtes, porque se trata de “una cuestión política” en la que no deberían involucrarse los magistrados.
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