La falta de oportunidades que deviene de la actual situación se está llevando por delante a unas cuantas generaciones al mismo tiempo. Ya no se trata nada más que de nuestros hijos, ya hablamos de nietos que pagarán los costos del desbarajuste actual, de descendencia que heredará un mundo en constante ebullición y un país endeudado hasta los dientes.
Y en el medio de esa vorágine del sálvese quien pueda es donde se hacen fuertes los mayores flagelos que padece nuestra sociedad. Es en la pobreza donde las adicciones y la delincuencia encuentran adeptos. Y no es una circunstancia nada más que nacional. Por caso vale citar a los jóvenes europeos que se unen a extremistas luchas religiosas ante la falta de oportunidades en sus países de residencia.
El Gobierno argentino perdió demasiado tiempo en esto de la prueba y el error. Y con cada error se llevó puestos a miles de jóvenes que ven limitadas sus oportunidades. Porque cuando hay que elegir entre costear los estudios y pagar el alimento diario el margen se achica. Y tampoco es que sobran trabajos por todos lados para achacarles nada más que haraganería.
Nobleza obliga, no se trata de una situación emergente de este Gobierno. Sucede hace décadas, en el pasado más cercano con el kirchnerismo. Pero es fundamental advertir que la debacle se siente y se sentirá con más fuerza durante esta administración que se creyó exitosa nada más pisó la Casa Rosada.
Entre la cantidad de veces del falso “lo peor ya pasó” a este verdadero “tiempo de tormentas”, miles de argentinos perdieron muchas oportunidades. Los que estaban debajo de la tabla se van hundiendo más. Los que estaban a mitad de tabla se van de a poco al fondo. Sólo la pasan bien los que están bien arriba, al tope, casi codeándose con el Gobierno de turno que no hace más que favorecerlos alentando políticas especulativas.
La brecha entre ricos y pobres es cada vez más pronunciada. Y se nota más porque los ricos son cada vez más ricos y los pobres cada vez más humildes. Entre ambas partes lo que deberían existir son oportunidades, pero este Gobierno es está encargando de aniquilarlas.
