El 7 de agosto es el Día de San Cayetano, patrono del pan y el trabajo, momento en el cual miles de vecinos se dirigen a su centro de oración para recibir la bendición de Dios a través del santo.
“Porque el santo es en verdad milagroso”, así lo sostuvo Zunilda Martínez, quien hace años llega hasta la parroquia San Cayetano. “Para mi es algo importante esta celebración, a mi me ayudaron mucho en esta congregación, gracias a ellos me acerqué a Dios y pude alejarme del alcohol y todo tipo de vicios, hoy llevo más de 15 años sobria”, contó.
“Hoy puedo estar acá y también acompañar a mi hija en este camino de salvación, porque por suerte conocí al padre Félix, quien me bendijo y realmente creo que hubo una curación milagrosa, son muchos los que le piden que interceda por ellos y los bendiga”, relató emocionada mientras distribuía agua bendita entre los feligreses que llegaban al santuario.
