
Una de cal y una de arena. La primera rueda de reconocimiento a la que fue sometido el brasilero detenido por el ataque a la cárcel de Oberá terminó con resultado dispar: un vecino de Picada Vasca, cerca del presidio, lo reconoció como el hombre que horas después del copamiento fallido se acercó a su chacra para pedirle agua y comida. Sin embargo, otro vecino de la misma zona dijo no poder identificarlo.
El procedimiento tuvo lugar ayer por la mañana en el Juzgado de Instrucción 1 de Oberá, a cargo de la magistrada Alba Kunzmann de Gauchat, y fue apenas el primero de la serie. Sucede que en las próximas semanas “Carlinhos” (36) también será sometido a reconocimiento por parte de cuatro testigos solicitados por la defensa, a cargo de la representante oficial Teresa Gómez de Roth.
Según pudo saber PRIMERA EDICIÓN, la presentación de los dos colonos realizada ayer fue dispuesta por el propio Juzgado, en base a la investigación que llevaron adelante en su momento efectivos de la Unidad Regional II de la Policía provincial.
El primero en declarar fue un vecino de Picada Vasca, un camino terrado lindante a 500 metros del presidio y donde los autores del intento de copamiento estacionaron el Renault Logan que minutos antes le habían robado a un remisero.
Ese testigo no dudó a la hora de señalar a “Carlinhos” como el hombre que, horas después del ataque a la cárcel y en supuesta plena fuga, golpeó a las puertas de su casa para pedirle agua y comida.
Sin embargo, el primer reconocimiento no fue completamente positivo, ya que más tarde fue el turno de otro vecino de la zona de la cárcel. Consultado por las autoridades, no supo identificar al sospechoso como quien también llegó a su chacra para pedirle alimentos.
Así las cosas, las autoridades aguardan con expectativa por la próxima rueda de reconocimiento, a realizarse en los días venideros. Sucede que a la misma deberán comparecer dos testigos considerados claves por los investigadores, el sereno que se trabó en lucha con los maleantes a metros del penal y el remisero al que le robaron el automóvil.
Esos dos testimonios fueron solicitados por Gómez de Roth, al igual que los otros dos testigos que también participarán en ese reconocimiento. Se trata de dos vecinos de la zona costera del río Uruguay, quienes aseguraron haberse cruzado con un grupo sospechoso horas antes de que se produjera el ataque. El resultado de esa segunda rueda podría marcar un antes y un después en la investigación.
“Carlinhos” permanece detenido junto a “Yoni” (22), la presunta “pata local”, por el episodio registrado alrededor de las 20.30 del lunes 30 de julio, cuando cuatro hombres se hicieron pasar por músicos y abordaron un remís en Oberá.
Los maleantes pidieron un viaje a Colonia Alberdi. Sin embargo, cerca de la Unidad Penal II del Servicio Penitenciario Provincial, a unos cuatro kilómetros del centro, develaron sus verdaderas intenciones, encerraron al chofer en el baúl y estacionaron en Picada Vasca.
El objetivo era rescatar al brasilero Vanderlei Lopes (32), un conocido asaltabancos que cayó oculto en El Soberbio, en noviembre pasado. No lo lograron gracias a que el sereno de una obra lindante al módulo A -al que tomaron de rehén- dio aviso al guardia del complejo, quien abrió fuego y puso así en fuga a los maleantes.