Primero fue sobre el arroyo Rosa Mística, en el paraje del mismo nombre, luego sobre el arroyo Zulma donde vive una comunidad Mbyá de la aldea Tacuarí, paraje Dos Hermanas en el kilómetro 29 de la ruta Provincial 13 y la última quedó habilitada el viernes pasado en la Picada Guaraní sobre el arroyo Angelito.
No son obras grandes o vistosas para el resto de la ciudad, pero sí necesarias para cada una de las comunidades. Esta última obra está enclavada en una colonia a siete kilómetros de la Ruta Nacional 14 a la altura del kilómetro 1300. Allí unas 20 familias debían pasar por encima de un tronco caído sobre el curso del agua para poder salir al pueblo o para ir a la escuela, en el caso de los chicos.
La pasarela construida es de 16 metros de largo y tiene la capacidad para el cruce tanto de personas como de motocicletas. La directora de la Escuela 379, Nora Salinas, que creó el Aula Satélite en esa colonia agradeció al municipio por la obra que permitirá a los chicos poder cruzar el arroyo en forma segura. Mientras que el presidente de la cooperadora, Mario Núñez, destacó el valor para la comunidad entera.