En los últimos años creció la presencia de las mujeres deportistas por las calles, equipadas de manera más o menos sofisticada.
Es que el running tiene una facilidad de acceso muy atractiva, no se necesita de mucho equipo, ni anotarse en gimnasios ni tener demasiado tiempo. Para confirmarlo, La Revista SextoSentido entrevistó a cuatro runners: tres de ellas son madres y una es abuela, las cuatro son profesionales, tienen sus trabajos fuera de casa y además continúan especializándose académicamente.
Con todas esas actividades pareciera que no tienen suficiente tiempo para entrenar. Y es cierto, pero ellas lo administran a la perfección: “uno se inventa los horarios, trato siempre de cortar todo al mediodía y salir a la siesta”, explica la abogada Rosana Corti, mamá de una niña de ocho años, quien entrena seis veces a la semana.
Para estas deportistas el running “modifica los hábitos y ayuda a encontrarse con uno mismo. Cuando corrés te concentrás en lo que te dice el cuerpo, en cómo te sentís”, específica la abogada Verónica Zapata Icart, conocida como “la abuela runner”.
Pero, ¿qué debemos tener en cuenta antes de iniciar? Para Verónica lo primero es “empezar con un entrenador y un nutricionista que nos oriente. También realizarse un examen clínico porque hay que tomarse las cosas con responsabilidad”. Añade que “hay que tener en cuenta la respiración, las zapatillas, el tipo de piso y la cantidad de kilómetros con los que vas a empezar”.
La empresaria Luciana Amado Siry, propietaria del gimnasio Espacio Wellness contó que su pasión por el running comenzó cuando tenía 10 años y acompañaba a su madre a correr por las cuatro avenidas de Posadas.“Yo la veía y notaba que disfrutaba. Así comencé, junto a ella”.
Bajo esta modalidad, en abril de 1990 durante la inauguración del Puente Internacional Roque González de la Santa Cruz, Luciana y su familia fueron los primeros en atravesarlo “fue una experiencia muy fuerte, de mucha adrenalina”.
Actualmente es madre de dos niñas de 3 y 5 años. Si bien le resulta complicado entrenar todos los días, ella sostiene que “uno tiene que ponerse objetivos y metas para poder concretarlos”.
Por otro lado, no es ajeno en general a los runners el aspecto social, es decir, salir en grupos. Esta disciplina también tiene su lado competitivo, pero sin dejar de lado la diversión y compartir momentos.
En definitiva el running “te cambia el estilo de vida, te enseña a ser más ordenado y a generar un hábito de constancia y perseverancia”, confirma la psicóloga María O Paiella, madre de un niño de 11 años.
Escrita por: Susana Breska Sisterna
Contacto: [email protected]
Producción fotográfica: Miguel Ángel Colman