Cientos de familias vivieron momentos de tensión durante la tarde del martes, cuando la lluvia se precipitó sobre esta ciudad. Muebles, electrodomésticos, ropas, todo fue arrasado por las aguas que se acumularon en distintos puntos cercanos a arroyos y en las áreas más bajas del casco urbano. La asistencia, tanto por parte de Defensa Civil, Protección Civil y los Bomberos, se vio desbordada por los pedidos de auxilio que no paraban de llegar desde los barrios posadeños.
El día después comenzó también con un panorama desolador para muchos. Gracias a la rápida atención de los vecinos, se organizaron cadenas de whatsapp y lugares donde acercar donaciones a los afectados. Hubo ollas comunitarias para las numerosas familias que debieron volver a hogares devastados.
Corte y movilización
Más allá de la solidaridad presente en los barrios, durante la mañana de ayer hubo movilizaciones y cortes en distintos puntos de Posadas, reclamando una pronta asistencia ante los daños que dejó la tormenta. Incluso señalaron que algunos asentamientos deben ser relocalizados con urgencia, ya que viven en constante caos cuando los temporales llegan a la provincia.
Sobre la ruta 12, a la altura del Mercado Central, las familias del barrio Vecinos Unidos cortaron el tránsito para exigir asistencia del Estado. “Tenemos en el barrio más de 100 familias afectadas por el temporal del martes y según el pronóstico esto va a seguir”, protestó ante PRIMERA EDICIÓN José Kunz, presidente de la comisión vecinal.
Este corte se prolongó hasta después del mediodía, en un accionar que además buscaba visibilizar las necesidades del barrio. “Nuevamente se inundaron todos y no se puede vivir más así, a los costados de los arroyos que desbordan. Hay más de 300 familias que están esperando un proyecto de urbanización y mensura para una relocalización que fue prometida por el Gobierno provincial y el nacional”, aseguró Kunz.
Una situación similar se vivió en las avenidas Bustamente y Jauretche, donde los vecinos bloquearon ambas manos de esta última con escombros, lo cual generó momentos de tensión entre los manifestantes y los conductores de vehículos. Se trataba de unas 30 familias de la chacra 244, que además se reunieron para realizar una olla comunitaria para los afectados del área.
“El agua llegó a más de un metro de alto en los lugares más cercanos al arroyo”, remarcó Tatiana Tobuna, una de las vecinas , mientras organizaban el almuerzo comunitario.
La madre de dos niños relató que en las obras del puente sobre el arroyo La Chancha que están realizando “es muy chica la abertura para la cantidad de agua, entonces sucedió que (el martes) superó su capacidad y desbordó. La tormenta se llevó los tablones grandes de la construcción y formó una especie de pared por arriba del puente, que juntó toda la basura”, explicó.
Aseguró que “cada vez que llueve pasa esto. Nosotros lo que pedimos ahora es la relocalización, porque por más que nos ayuden con colchones y frazadas, todas esas cosas se pierden cada vez que llueve porque nos volvemos a inundar”.
A su vez, Soledad Armoa, otra vecina de la chacra 244, señaló que “este fue el peor temporal que vivimos, el agua se llevó paredes, electrodomésticos, todo lo que tenía la gente. Muchos de los afectados tienen niños pequeños y necesitamos asistencia”.
En cuanto al reclamo vecinal, añadió que “pedimos ayuda y también ser relocalizados, porque cada vez el clima viene peor y nosotros necesitamos una vivienda digna”.
Volver a empezar
En la chacra 237, en el día después de la crecida de La Chancha, el panorama era desolador. En unas pocas horas “el agua superó más de un metro de altura”, relataron los vecinos. Rodeados por el barro en caminos intransitables, debieron encontrar la forma de volver a sus hogares y seguir adelante.
“Perdimos las pocas cosas que teníamos por lo rápido que subió el agua”, lamentaron. Se trata de familias numerosas, con muchos niños pequeños, que prácticamente se quedaron “con lo puesto”.
Por otra parte, unas diez familias de la zona de Jauretche y Quaranta (ruta 12) perdieron casi todo cuando sus casas quedaron atrapadas en medio de las aguas que se acumularon en el área. Así lo contó a PRIMERA EDICIÓN Sandra Cardozo, vecina de Itaembé Miní. “En la bajada que hay acá, todos fuimos afectados por la cantidad de lluvia que trajo la tormenta”, agregó.
“Somos unas 10 familias las afectadas en esta zona y la pasamos muy mal. Luego del temporal, vinieron los Bomberos junto con Defensa Civil y nos quisieron sacar de acá, pero nosotros no tenemos otro lugar donde ir y no queríamos dejar nuestras cosas”, explicó la mujer.