La crisis económica golpea fuertemente sobre diversas costumbres del gasto y consumo diario y, además, atenta contra los proyectos de inversiones y los sueños propios de los asalariados que, en la mayoría de los casos, buscan cosechar con su trabajo diario el acceso a la vivienda y el vehículo propio.
Según los últimos informes del sector automotor a nivel nacional, con los datos brindados por la Asociación de Concesionarios de la Argentina (ACARA), durante el mes de septiembre se registró una fuerte caída en las ventas de las unidades cero kilómetro y también un derrumbe de las suscripciones de planes de ahorro para adquirir un vehículo nuevo.
En Misiones, los niveles de porcentajes de caída en ambos factores promediaron por sobre el 50%.
El aumento del dólar impacta de gran manera sobre los precios de los vehículos nuevos, aunque sean de fabricación nacional. Debido a esto, los suscriptores de planes de financiación fueron recibiendo enormes aumentos en sus cuotas mensuales.
Cabe destacar que el plan de ahorro pone en desventaja al usuario en momentos de inflación y aumentos de precio, ya que la cuota que se debe pagar cada mes toma como referencia el precio de lista actual del modelo.
En tanto, el sector de inmuebles, sin dudas, fue uno de los principales afectados por el escaso movimiento financiero y acusó, en demasía, el golpe propinado por la corrida del dólar.
Debido a esto PRIMERA EDICIÓN realizó un relevamiento por varias concesionarias e inmobiliarias de la provincia.
Marcha atrás posterior al récord
La industria del automotor atraviesa un momento complicado a nivel nacional. El mercado en Misiones no escapa a los problemas que atraviesan al sector. Luego de una primera mitad de año con índices que rompieron récords de producción y venta, durante los últimos tres meses los empresarios manifestaron una fuerte caída en la cantidad de patentamientos de unidades cero kilómetro.
Al mismo tiempo, reconocieron que el incremento en los precios de los automóviles hizo disminuir la venta y también la cantidad de adquisición de planes de ahorro de autos.
A nivel general, las terminales automotrices registraron una caída de más del 50% sobre las ventas durante el mes de octubre. En tanto que las suscripciones para la compra de autos a través de planes de ahorro, también tuvo un retraimiento del mismo valor porcentual. Debido a esto, las empresas adelantaron que prevén cerrar el movimiento anual con despachos por debajo del año pasado.

Javier Menor, ejecutivo de la empresa Servando, aseguró que “en Misiones el nivel de caída de ventas fue mayor a lo que pasó en el país. A nivel nacional cayó alrededor del 30% en comparación al año pasado y en la provincia fue cerca del 40% en los últimos tres meses, de agosto a octubre”.
Además, remarcó que “la caída de ventas se debió principalmente al aumento de precios de los vehículos. En algunos casos subieron los valores hasta un 30%. Eso hizo que caiga mucho la demanda”.
“Hasta junio el movimiento venía perfilado para que sea el mejor año de ventas de la historia. Sin embargo, en el global anual, la caída va a ser de alrededor de un 10%, porque tuvimos unos seis meses muy buenos con mucho saldo a favor pero, ahora, estamos en un momento muy malo”, añadió.
Por su parte el gerente comercial de Lowe S.A., Carlos Lowe, indicó: “En septiembre el movimiento de ventas llegó a caer hasta un 70% pero en octubre comenzamos a tener un repunte. La venta venía muy acelerada hasta cerca del mes de agosto, luego en septiembre, con lo que pasó con el dólar cayó. Ahora que ya está estabilizando un poco el dólar, se empezaron a mover las ventas de nuevo”.
Además Lowe dijo que “en los últimos meses hubo varios aumentos de los precios pero, ahora, se están estabilizando. Los aumentos de ahora no son considerables. Principalmente los precios subieron mucho en agosto y septiembre”.
“Estas variaciones de venta tienen relación, más que nada, con la psicología de la gente. Cuando hay mucha inestabilidad, la gente prefiere esperar, no gastar y ver qué pasa”, añadió.
Ramón Alcaraz, propietario de Alcaraz Automotores, manifestó: “La caída de ventas está entre un 40% al 50%. Misiones no está ajena al comportamiento del nivel nacional. Esta caída se siente desde el mes de julio y cada vez se nota una acentuación más profunda del problema”.
Al respecto consideró que, el grave problema del sector, está relacionado “con la variación brusca de la paridad cambiaria en Argentina, con la cual los autos tienen una directa relación tanto para las empresas productoras como las exportadoras”.
“Consecuentemente, la depreciación del signo monetario se trasladó a los precios. Quizás en algunos casos, no en su total medida, afecta fuertemente el valor de los automóviles. Al no traer aparejado un mayor nivel de ingresos, la distancia que se produce entre el interés de comprar un auto y los precios reales se agrandó”, explicó Alcaraz.
Sobre el aumento de los precios en la cotización de un auto 0km, recordó que “los autos importados tienen una dependencia del 100% con el valor del dólar. Los importadores no han podido trasladar toda esa variación a los precios porque no hay un mercado comprador. En cuanto a las empresas que tienen su producción nacional, también sufren las consecuencias de esta situación, quizás por eso los precios siguen sin estar totalmente ajustados. Hay diferencias todavía a computar en el futuro, pero se están acomodando los precios”.
Planes de ahorro en caída libre
Marcadas por una gran línea de retracción, se encuentran las adquisiciones de planes de ahorro de autos, otro eje principal que perjudica al movimiento del sector automotriz.
En lo que va del año, los 0km acumulan aumentos del 60 al 80% que se trasladaron a las cuotas y dejaron a los ahorristas en una situación muy compleja. A nivel nacional se alcanzó un nivel de morosidad del 25%.
Mientras que, algunos clientes, incluso pasaron a pagar más del doble que hace un año porque, además de subir el precio, se sumó que su modelo fue discontinuado por la fábrica y el plan pasó a ajustarse por uno similar más costoso.
Según remarcó Javier Menor “en Misiones los planes de ahorro cayeron más del 50%, porque la relación de las cuotas con la capacidad de pago de los clientes se distanció mucho. Los planes de ahorro subieron mucho, directamente proporcional al precio de los autos. Incluso, las personas que tienen plan de ahorro, fueron más afectados con la reciente devaluación porque sus sueldos no tuvieron ajustes mayores al 15% o 20% de actualización”.
Sobre la misma cuestión Carlos Lowe informó que “en la provincia se vendían 800 planes por mes, no creo que ahora lleguemos a 300 planes este mes. Las suscripciones a planes de ahorro cayeron mucho, porque a la gente se le redujo mucho la capacidad de ahorro”.
Escaso movimiento en el sector de inmuebles
El rubro inmobiliario también sintió el impacto por la escasa demanda y la influencia que produjo la corrida del dólar.
En relación a esto, el empresario Miguel Macri, expresó que “con la devaluación del dólar para mantener la estabilidad, una propiedad tendríamos que venderla al doble del valor de plaza. En Misiones siempre trabajamos en pesos, no en dólares pero, con la devaluación, deberíamos subir el doble del valor. Sin embargo, la demanda cayó y hay que reevaluar los valores”.
Macri, con muchos años en el sector, comentó que “en nuestro caso, siempre leemos el mercado, tratamos de encontrar el equilibrio entre la oferta y la demanda. No es sencillo de aplicar, porque el mercado no está dispuesto a pagar lo que debería valer una propiedad, entonces tenemos que evaluar cada caso en particular, tanto en ventas como alquileres. En esto último, hay que ponerse del lado del inquilino, que sufrió varios aumentos de servicios básicos pero no tuvo subas salariales”.

Reconoció que “la demanda cayó muchísimo, nosotros por lo general vemos la trayectoria del inquilino, si paga en tiempo y forma. Entonces, en este cuadro de situación renovamos por un semestre más sin aumentar el precio. Entendemos el momento, somos solidarios y preferimos acordar un monto que pueda pagar, para que la vivienda siga ocupada”.
El empresario local además contó que hubo un antes y después, a partir de la corrida del dólar. “El ajuste del mercado siempre fue un 20% anual aproximadamente, pero fue así hasta marzo, abril, cuando cambió todo debido a la variación del dólar. Hay que leer el mercado para crecer, nosotros preferimos mantener el inquilino y no tener desocupada la vivienda, estamos atravesando una situación complicada”, afimó. “En cuanto a las ventas, uno puede pedir el doble, pero el mercado no lo puede pagar”, amplió.
Según Macri, “la demanda es escasa, qué se vende: terrenos, loteos financiados, porque son otros montos. Las propiedades grandes no se venden”.
“El año pasado veníamos creciendo porque había financiación bancaria, con créditos blandos. En la actualidad no hay esa facilidad y también nos perjudica”, concluyó.
En consonancia opinó el agente inmobiliario Javier Borges quien, ante la consulta de este Diario, afirmó que “las ventas dependen de muchos factores, es muy variable porque cuando bajó el dólar, se reactivó un poco el sector”. “Cada caso es diferente, tenemos que analizar a clientes y propietarios de maneras distintas. Por eso también hay una necesidad de profesionalización del sector”, finalizó.
Apóstoles, complicada situación en ambos sectores
Referentes del sector inmobiliario y del automotor de esta localidad afirmaron que ambos sectores sufren una difícil situación financiera, producto del poco movimiento de clientes para obtener una casa o un auto.
El empresario inmobiliario Ricardo Pszegotski comentó a PRIMERA EDICIÓN que “estamos pasando uno de los momentos más difíciles, aún no llegamos a una crisis, pero estábamos acostumbrados a trabajar mucho. Los créditos hacían que el mercado inmobiliario se muevan de manera constante, sin embargo en la actualidad eso no ocurre por las altas tasas que ofrece el sistema financiero”.
“La gente piensa en su economía y confía en otras opciones, como por ejemplo la renta financiera, situación en la cual no coincido, no sé hasta dónde es mejor invertir en eso antes que en un inmueble, que sí conserva el precio a lo largo del tiempo”, señaló.
Pszegotski se lamentó porque “la demanda cayó un 80% en las ventas, en especial por la falta de créditos accesibles; no así los alquileres. Nuestro sector bajó las pretensiones, porque vimos como el promedio de aquellas personas que viven en casas alquiladas también descendió”.
En el caso de las ventas, el empresario admitió que prácticamente es nula la actividad en ventas. Incluso “una venta, de darse, se está efectivizando en un valor de un 15 o un 20% por debajo del costo real”.
Por otra parte, el empresario Fernando Ostafchuk, dijo que el sector automotor “es uno de los más golpeados, el dólar impactó mucho y sobre todo en los 0km. Nosotros hace tres meses que no vendemos un 0km y hay pocas consultas”.
“Las altas tasas de interés son un enemigo y paralizan las ventas”, cerró.
Ostafchuk, quien también es el presidente de la Cámara de Comercio de Apóstoles explicó que “los usados son por los que más preguntan, pero el vehículo 0km está ligado a éste y así se frena la cadena de automotores”.
“El sector está muy castigado, no hay cómo incentivar, ni siquiera bajando u ofreciendo con ofertas. En un tiempo se reactivó, pero fue una ráfaga porque, limitado, a los pocos días se frenó. Los que no somos concesionarios oficiales nos estamos moviendo con reservas”, admitió el empresario.
Por último, Ostafchuk dijo que “mientras no se muevan las tasas de financiación, que hoy están altas, vamos a seguir igual. Si mejoran las condiciones repercutirá en la venta de automóviles. Mientras tanto, seguiremos viendo otras opciones para incentivar a los clientes, ya sea mediante ofertas u otras maneras, a pesar que el sector está viviendo una situación muy complicada”.
Sin demanda en la Zona Centro
Si hace un tiempo el asalariado podía soñar con la casa propia y el auto cero kilómetro, la realidad en Oberá indica que en la actualidad ni siquiera en sueños pueden contemplar la idea.
Las empresas concesionarias de vehículos están paradas y los representantes coincidieron en señalar que el movimiento fue nulo durante los días posteriores a la corrida del dólar. En los últimos dos meses se promedió una baja del 40%.
“De entregar 18 unidades por mes a principio de año bajamos y apenas llegamos a 5. Los planes de ahorro corren la misma suerte, a pesar de que hay buenos descuentos, la brecha se agrandó demasiado y se hace imposible. Las tasas también subieron, del 21 al 39%”, detalló un vendedor local.
Más difícil aún, a pesar de estar en primer lugar de prioridades para el grupo familiar, es la posibilidad de acceder a la casa propia. “Las ventas están paradas directamente”, reconoció la propietaria de una reconocida inmobiliaria de la ciudad.
“Días pasados nos reunimos por el día del martillero y hablamos del tema. En general, la baja en ventas, es del 70%. Nosotros, en lo que va del año, vendimos dos casas solamente. Las nuevas leyes complican más todavía, porque al adquirir un inmueble se aplica el Impuesto a las Ganancias, ya que es considerado un bien ganancial. Además, aumentaron todos los impuestos. Rentas ya informó un nuevo incremento. Sumado a eso, el título de propiedad hoy cuesta más de 40 mil pesos. Ni en cuotas llega el asalariado. Después debe pensar en la construcción de la vivienda, lamentablemente no llegan”, afirmó la referente del rubro, quien completó: “en la actualidad no hay oferta, ni demanda”.
Momento más que difícil en Iguazú
El representante de González Automotores en Puerto Iguazú, Rudy Bundziak, admitió a este Diario que hubo una caída en las ventas pero “nosotros todavía estamos vendiendo un poco de planes de ahorro, que es una salida para paliar la situación crítica”.
“El descenso de las ventas se debe a la suba del dólar y por la tasa de interes que se fue a las nubes, además los sueldos no acompañan a la inflación. Atravesamos un momento complicado y no hay perspectivas inmediatas que esto se modifique”, afirmó el empresario.
Bundziak dijo que “el año pasado se vendió bien porque las tasas de los bancos eran financiables”.
“Si tomamos el valor del dólar, hoy un automóvil cuesta el doble del año pasado. En nuestro caso ofrecemos vehículos a muy buen precio, con un descuento interesante si solamente es con dinero, sin recibir un usado. En estos casos, la oferta podría bajar hasta en unos $180 mil, pero tampoco es convincente porque la gente tiene miedo, no sabe qué va a pasar la semana que viene”, manifestó.
El empresario se mostró esperanzado: “Hay que tener confianza en el país y que la inflación pare de subir, eso generará más certezas entre la gente. Las personas que tienen ahorros en otra moneda, que no es peso argentino, no gasta esperando que suba. Se entiende que todos están preocupados porque es un momento complicado, es un año muy difícil”.
San Vicente vive un descenso pronunciado
En San Vicente, los empresarios del rubro automotor están muy preocupados por el descenso de las ventas, que fue de un 50% en los 0km.
Y, de acuerdo a las expresiones de los dueños de agencias de vehículos, en este 2018, la venta de usados cayó un 40%. En ambos casos es un promedio, ya que las comercializaciones dependieron de la modalidad.
Los empresarios se quejaron porque la mayoría de las ventas se hacían por medio de los bancos y con créditos “ya sea UVA o préstamos personales”. “Pero al ser tan altos los intereses, los clientes no compran autos, incluso casi no hay consultas”, aseguraron los comerciantes consultados por PRIMERA EDICIÓN.
En San Vicente no hay agentes oficiales de una marca, existen comercios que trabajan en conjunto con agencias de Posadas, Oberá y Eldorado, lo que también es perjudicial porque, esta situación, incrementa más el precio de un automóvil. Los empresarios admitieron también que “bajaron las ventas de planes de ahorro en este año”.
Por otra parte en el caso de la comercialización de inmuebles, Margarita Carlotto, dueña de una inmobiliaria, explicó a este Diario que “la venta bajó un poco durante este año, pero nosotros nos acomodamos a la situación económica para seguir vendiendo”.
“Cobramos las cuotas en valor del precio de bolsas de cemento y son valores fijos. Lo que hicimos es sumarles cuotas a los clientes, es decir de 48 pasamos a 60 meses y mantuvimos los precios en pesos”, añadió
“Nosotros trabajamos con loteos, damos la posesión inmediata al cliente y eso les facilita porque pueden comenzar a construir en forma inmediata”, comentó Carlotto.
Con respecto a las consultas, señaló que “recibimos unas cinco preguntas por día, eso no cambió mucho. No obstante, son pocos los que cierran las operaciones, o en algunos casos, se concretan pero tardamos un poco más para cerrar la venta”.