La cefalea es una de las enfermedades que genera mayor discapacidad en el mundo y es la principal causa de ausentismo laboral. Misiones no es la excepción.
Según indicó a PRIMERA EDICIÓN el neurólogo Hugo Solís González, la migraña -que es un tipo de cefalea- es el motivo más recurrente de consulta en cualquier consultorio del mundo.
“En general, lo ideal es que los pacientes que sufren migraña u otro tipo de cefalea sean tratados por un médico neurólogo. El profesional interrogará al paciente sobre el tipo de dolor que sufre, la cantidad de episodios que tiene por mes, si es discapacitante o no. Puede que el dolor no sea tan intenso y se pueda manejar con analgésicos suaves como paracetamol o ibuprofeno. El problema es cuando el dolor es muy recurrente y discapacitante. Es muy importante un buen abordaje del paciente para poder hacer el tratamiento más adecuado”, remarcó.
Según indicó el especialista, no se conoce con certeza la causa de la migraña “pero sí se sabe que hay una predisposición de ciertos pacientes padecer migraña y están involucrados muchos mecanismos en la génesis de la patología pero la buena noticia es que hay tratamientos que pueden ayudar a quienes la padecen a cambiar su calidad de vida”.
Las mujeres son mucho más proclives a sufrir migraña, “hay una predisposición femenina marcada, por cada tres mujeres que lo padecen solo hay un hombre. Esto tiene que ver también con el ciclo hormonal femenino, pues todos los vaivenes hormonales que sufre la mujer durante su ciclo mensual tiene un rebote en los cuadros de cefaleas”.
El médico advirtió además que también se observan muchos casos pediátricos de migraña, “hay chicos que son migrañosos desde pequeños, a veces se manifiestan con cuadros de cinetosis (mareos) que a veces son equivalentes migrañosos, no necesariamente con dolor de cabeza”.
Dos tipos de tratamientos
En la actualidad, según precisó Solís González, hay dos tipo de tratamientos contra la migraña: el preventivo y el abortivo del dolor durante un episodio.
“Los tratamientos más conocidos son los abortivos del dolor a base de ibuprofeno, anaproxeno o ketorolac. Pero muchas veces nos olvidamos del tratamiento preventivo que puede ayudar al paciente a reducir la frecuencia de los episodios de dolor de cabeza y la intensidad del dolor. Con este tipo de tratamientos podemos transformar un dolor intenso a uno más que se puede manejar con un analgésico suave”, indicó.
En la actualidad hay un cambio de paradigma en el diagnóstico y tratamiento de la migraña, “para las escuelas clásicas, los pacientes que tenían menos de 10 a 15 episodios de migraña mensuales, no debían recibir un tratamiento preventivo. Eso cambió en los últimos años, cuando se empezó a prestar atención a una inmensa cantidad de pacientes que pasan días y hasta una semana por mes con dolor de cabeza; es un tiempo perdido, porque el dolor inhabilita a la persona… si uno suma la cantidad de días perdidos en la vida de un paciente migrañoso puede tener una mirada más integral del impacto de esta enfermedad”, advirtió.
En la actualidad, señaló que incluso se trata para prevenir el dolor a los pacientes que tienen dos o tres episodios por mes cuando estos son muy intensos y discapacitantes.
Mecanismo rebote
Si bien el país no cuenta con un aparato estadístico que mida la incidencia de la cefalea en la población, Solís indicó que “se considera el principal motivo de consulta en todo el mundo”. Señaló además su inquietud por la tendencia generalizada a la automedicación “la gente se trata con migral, tetralgil u otros medicamentos que tienen ergotamina que es un fármaco vaso-constrictor que ayuda a disminuir el dolor de cabeza en cuya génesis está la vasolidatación. El problema es que es una droga preparada para aquellos que tengan dos o tres episodios por año, pero no para los que sufren más episodios porque la ergotamina puede producir aumento de los dolores de cabeza, debido al mecanismo rebote”.
Solís anticipó que está próxima a ser autorizada en el país una nueva droga, cuyo nombre de fantasía será Aimovig, que ya se comercializa en EEUU y Europa. Se trata del primer tratamiento específicamente desarrollado para prevenir la migraña, bloqueando el péptido relacionado con el gen de la calcitonina, que desempeña un papel esencial en la migraña.