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Misiones tiene ese no sé qué que les puede. En Semana Santa de este año reunieron todo lo que tenían para los más vulnerables e hicieron mil y pico de kilómetros para que llegue a los barrios más humildes de San Pedro. La intención era volver, sin dudas, pero el año que viene. Sin embargo, los muchachos de “Una mano para un hermano” decidieron pegar la vuelta y cerrar un año complicado para los más humildes con otra visita a la tierra colorada: este fin de semana estuvieron en la ciudad de San Vicente.
Hace tiempo que planearon este viaje: vienen juntando donaciones desde la última visita en marzo gracias a la solidaridad de familias de su Solano natal, en Provincia de Buenos Aires, quienes ya conocen su labor en Misiones, Chaco, Corrientes, Santa Fe y ahora ya se encuentran en tratativas de viajar, con su solidaridad en el portaequipaje, a la provincia de Santiago del Estero.
Juntaron cientos de bolsas de consorcio con ropas, juguetes, libros y golosinas para los más chicos, entre otras cosas, y los mandaron para Misiones. El camión con todo llegó hace casi dos semanas y los colaboradores misioneros se encargaron de dejar todo listo esperando la llegada del grupo que organiza todo en Buenos Aires. Para ello tienen a su representante en la provincia, Antonio González, quien ayudado y acompañado por gente de San Vicente se encargó de dejar todo a punto. “Por suerte tenemos gente que colabora mucho con nosotros y nos facilita la parte del transporte, sin ellos no seríamos nada”, aseguró a PRIMERA EDICIÓN Luis “Caña” Escalante, uno de los muchachos que integra esta asociación solidaria que se formó encontrándose para jugar al fútbol.
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La llegada a San Vicente
En la Capital de la Madera, visitaron los barrios Sol de América, San Miguel y Progreso Unido, donde los esperaban vecinos que ya sabían de su labor. “La verdad que muy bien está visita a San Vicente, nos acompaño el clima, hace un hermoso día”, dijo “Caña” a este Diario ayer mientras compartía un almuerzo con toda la gente de la zona en el Club “Sol de América”, ubicado en el barrio homónimo. “Estamos muy contentos”, remarcó.
Hace tiempo que los muchachos de “Una mano…” visitan la provincia. “Hace añares (sic) que venimos a Misiones, como 14 años. Cada tanto nos desvíamos y vamos a Chaco, Corrientes, Santa Fe, pero hemos venido muchas veces a la provincia”, señaló “Caña” y detalló todas las ciudades que conocen gracias a González, su colaborador en la provincia, “San Pedro, Posadas, Santa Ana, Andresito. De a poco vamos conociendo todo Misiones”.
La agrupación está conformada por cerca de siete familias que “nos encargamos de juntar las donaciones y ordenarlas. Lavamos la ropa y cuando vemos que está todo bien las guardamos en bolsas de consorcio y queda listo para el viaje”, explicó “Caña”. “Somos casi 26 personas del grupo. Siempre que viajamos contratamos un micro en el que vamos cerca de 60 pero, este año, por la situación económica del país tuvimos que viajar sólo 12 y sacar los boletos en colectivos de línea porque la gente no está en condiciones de pagar, no tenían plata. Está muy complicado y ésto lo hacemos todo a pulmón”, explicó.
Luego de la labor solidaria y de repartir todo lo que trajeron, llega el momento de volver. “Nos quedamos hasta el domingo (por hoy). Hemos cometido el error de apresurarnos y sacar los boletos de ida y vuelta porque podríamos salir el lunes de acá y disfrutar un poco más el domingo. Siempre nos pasa lo mismo, por más días que tengamos es corto”, indicó. A la pregunta de si les gusta la provincia, la respuesta es contundente: “Es hermosa Misiones”.
Tras el regreso volverán a reunir las donaciones y después decidirán qué provincia será la beneficiada el año que viene. ¿Volverá a ser Misiones? “Eso lo decidiremos dentro de un mes porque tenemos otros destinos como Empedrado en Corrientes, Chaco, hablamos con gente de Santiago del Estero, pero Dios quiera que podamos volver”, cerró.