Con sus seis coronas, Ogier es el segundo piloto más laureado de la historia del WRC y del deporte automovilístico francés, por detrás de los nueve entorchados de su compatriota Sébastien Loeb.
“Estoy tan orgulloso de mi equipo, son los mejores”, declaró el francés, emocionado. “Hemos luchado hasta el final y no nos rendimos nunca”, subrayó Ogier, que finalmente consiguió imponerse a Neuville y Tänak.
“La temporada fue tan intensa, y al final todo se decidió en dos especiales, tengo sentimientos encontrados”, admitió el piloto, que dedicó su victoria a su esposa, la presentadora de televisión alemana Andrea Kaiser.
El desenlace de una de las temporadas más apasionantes desde hace quince años era esperado por muchos durante la 24ª y última especial (ES24) del Rally de Australia.
El belga Neuville (Hyundai) abandonó en la ES22 con una rueda arrancada al salirse de la trazada y el estonio Tänak (Toyota) tuvo que rendirse en la especial siguiente al dañar su transmisión tras una colisión con un árbol.
Ogier, que recuperó su puesto de líder del campeonato desde su 2ª posición en Cataluña, por detrás de Loeb, hace tres semanas, ocupaba el 6º puesto en Australia antes de que Tänak abandonara, una posición que le habría permitido conseguir el título aunque el estonio le hubiera ganado.
Fuente: AFP/NA