
En las últimas semanas comenzaron a registrarse casos de hantavirus en la pequeña localidad de Epuyen en la provincia de Chubut. Los últimos números elevan la cifra de víctimas fatales a diez con un total de 28 personas infectadas, aunque se seguían estudiando otros 60 casos sospechosos. También se estudia la muerte de dos niñas en Entre Ríos.
Ante el alerta que genera la enfermedad, en esta nota la explicación de qué es, cuáles son los síntomas, cómo se transmite, se trata y se previene el hantavirus.
En su página oficial, la Secretaría de Salud de la Nación explicó que el hantavirus es una enfermedad viral aguda grave, causada por el virus Hanta. Los ratones silvestres (principalmente los colilargos) lo transmiten a las personas, eliminando el virus en la saliva, las heces y la orina.
Una de las formas de transmisión es la inhalación. Esta es la causa más frecuente y ocurre cuando se respira en lugares abiertos o cerrados como galpones, huertas o pastizales donde las heces o la orina de los roedores infectados desprendieron el virus contaminando el ambiente. Otra forma es el contacto directo, es decir al tocar roedores vivos o muertos infectados, o las heces o la orina de estos roedores. El contagio también puede ocurrir al ser mordidos por roedores infectados o puede transmitirse entre personas a través del contacto estrecho con alguien infectado durante los primeros días de síntomas, a través de la vía aérea.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas del hantavirus se parecen a un estado gripal: fiebre, dolores musculares, escalofríos, dolores de cabeza, náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea.
Después de algunos días puede haber dificultad respiratoria que puede agravarse produciendo lo que se conoce como “síndrome cardiopulmonar por hantavirus”, que puede llevar a la muerte si la persona no es internada a tiempo.
No existe tratamiento específico para la enfermedad. Aquellos con síndrome cardiopulmonar por hantavirus deben ser asistidos en establecimientos hospitalarios.
Misiones, zona endémica
En Argentina se han identificado cuatro regiones endémicas: Norte (Salta, Jujuy), Centro (Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos), Noreste (Misiones) y Sur (Neuquén, Río Negro y Chubut). Para prevenir esta enfermedad es importante evitar la convivencia con roedores y el contacto con sus secreciones; que los roedores entren o hagan nidos en las viviendas; tapar orificios en puertas, paredes y cañerías, realizar la limpieza con una parte de lavandina cada nueve de agua, humedecer el piso antes de barrer para no levantar polvo.Ventilar por lo menos 30 minutos antes de entrar a lugares que hayan estado cerrados (viviendas, galpones).
Si se encuentra un roedor vivo: usar veneno para roedores o tramperas para capturarlo (no intentar tocarlo o golpearlo). Si se encuentra uno muerto: rociarlo con lavandina junto con todo lo que haya podido estar en contacto y esperar un mínimo de 30 minutos.