Desde el programa provincial de Lepra que funciona en el Hospital de Enfermedades Transmisibles “Pedro Baliña” se rechazó que la provincia esté ante un brote de la enfermedad.
“Es importante sacar ese concepto de noticia alarmante dirigida a la población, ya que un medio nacional hizo la divulgación de un informe oficial del Ministerio de Salud sobre el trabajo de nuestro programa, y se entendió que hay un brote de lepra en Misiones, cosa que es absolutamente falsa. No hay ningún tipo de alerta ni mucho menos un brote”, dijo a PRIMERA EDICIÓN la médica dermatóloga Ana Liberatore, quien es parte del programa.
“La lepra es una enfermedad endémica de zonas generalmente cálidas. Tanto el NEA como el NOA suelen tener casos todos los años porque no ha sido erradicada de estas regiones por una cuestión climatológica”, deslizó la médica.
“En Misiones, al respecto de eso, queremos acotar que todos los años se producen casos nuevos. No hay un brote y mucho menos habría que alarmarse”, insistió.
De acuerdo a Liberatore, se trata de una enfermedad que nunca se erradicó.
“No sabemos por qué la información fue tomada como que estábamos ante la presencia de un brote. Todos los años se publican en el boletín oficial los casos nuevos, las formas y las personas que están en tratamiento y nada más. Pero no estamos ante una supuesta propagación ya que, en todo caso, esta enfermedad no es como la fiebre amarilla u otras enfermedades”, remarcó.
Como para que la población tenga una idea, Liberatore señaló que este año se trataron 36 casos nuevos y hay en total 72 en tratamiento. Con relación a 2017 la cifra se mantiene estable y ha bajado, inclusive, en comparación con otros años, según datos que se desprenden del área de estadísticas del programa.
“Hay que entender que es una provincia endémica y no es sólo aquí, sino que también están más o menos en esa situación Chaco, Corrientes, Formosa”, graficó. “El programa está en funcionamiento pleno, todos los días, damos la medicación y es algo habitual para nosotros”, confió la profesional.
Por su parte, Ernestina Valdéz, encargada del programa, quien además realiza el trabajo estadístico, señaló a PRIMERA EDICIÓN que “hubo años en los cuales se habían denunciado oficialmente hasta 52 casos nuevos. Ahora hemos bajado esas cifras y estamos en 36 nuevos pacientes, cantidad que es similar a 2017”.
Como para entender que la cifra actual de nuevos casos jamás podría ser alarmante, Valdéz especificó que primero se debe superar la media de 100 denuncias nuevas, y que, ni en 2008, cuando se registraron 52 fueron motivo de alarma.
Año a año esos registros se elevan desde las provincias para que queden asentados en el boletín oficial como dato estadístico, los cuales después se hacen públicos a través de los distintos organismos de salud.
Asimismo, Valdéz hizo hincapié en que el trabajo se hace a partir de casos clínicos ya establecidos como tales. Es decir que el paciente se acercó a consultorio y tuvo diagnóstico.
“No se toman casos ocultos, lo que no nos denuncian, es decir no empiezan el tratamiento no ingresan a nuestras estadísticas”, aseguró la profesional.
Medicación garantizada
Consultada sobre si Nación mostró algún tipo de demora en el envío de los tratamientos, tal y como ocurrió con otros programas, Valdéz enfatizó que “no”. “Todos los pacientes bajo tratamiento en Misiones están recibiendo la medicación. Cuando viven lejos de Posadas se envían a los centros de salud más cercanos a sus hogares, para que el traslado no sea un problema y accedan a la medicación de forma segura”, indicó la encargada.