Durante diciembre el equipo de Bomberos Voluntarios de Candelaria se encontró con un pichón de urutaú, animal que fue enviado a la reserva homónima ubicada en el barrio del Lago, en un área protegida entre Garupá, Candelaria y Profundidad.
“En ese entonces, el pichón no se quería desprender de la ramita donde estaba, solo, y solicitamos la intervención de la guardaparque para que tome medidas y pueda sobrevivir”, relató la jefa del Cuartel Ramona Blanco al medio Candelaria Online.
Además, añadió que fue “cuando volvíamos del incendio, al alumbrar el faro de la camioneta hacia un poste, pude notar los ojos brillosos del ave que habría caído del árbol”.
Luego de encontrar a este pequeño espécimen, los integrantes del equipo de Bomberos Voluntarios se comunicaron con guardaparques para que se ocuparan de la protección, alimentación y saneamiento para que pudiera sobrevivir.
“Vamos a ver al pichón una vez por semana y está muy bien. Es importante el rescate de especies como ésta que están en extinción. Según supimos por los guardaparques, cuando se lo trajo él apenas tenía semanas de salir del huevito, sin plumitas, y casi un milagro su posibilidad de vida”, contó.
Cuando se encuentra a una cría de animal silvestre el procedimiento consiste en llevarlo al lugar y esperar hasta la aparición de la madre. Con el pequeño urutaú esto no resultó y debió ser enviado a la Reserva donde permanecerá hasta que pueda ser liberado en su hábitat.