
“Grandes progresos” sobre desnuclearización y un posible acuerdo de paz, son las expectativas que el gobierno surcoreano deposita en la cumbre que el líder norcoreano, Kim Jong-un, y el presidente de EEUU, Donald Trump, celebrarán en Vietnam este miércoles y este jueves.
Así lo señaló el portavoz del Ejecutivo surcoreano, Kim Eui-kyeom, quien subrayó que “teniendo en cuenta la agenda que anunció la Casa Blanca y la agenda de la que tenemos conocimiento, se espera que el presidente Trump y el líder Kim traten temas en detalle durante sus encuentros cara a cara”.
“Espero que haya grandes progresos como resultado de estas conversaciones“, añadió Kim en el comunicado reproducido por la agencia Yonhap. La cumbre no comenzará hasta bien entrada la tarde del mañana, cuando Trump y Kim “se saludarán brevemente a solas” antes de iniciar una cena de trabajo, según explicó hoy la Casa Blanca.
Se desconoce la agenda para el jueves, segundo día de la cumbre, pero medios y fuentes diplomáticas especulan que el formato será similar al de la histórica primera reunión que ambos mantuvieron en Singapur en junio, en la que se vieron cara a cara dos veces.
El portavoz surcoreano también insistió en la posibilidad de que ambos mandatarios firmen durante la cumbre algún tipo de acuerdo político, para cerrar la herida abierta durante la Guerra de Corea (1950-53), que se cerró con un armisticio y no con un tratado de paz.
“Como dije ayer (lunes), no conozco los detalles sobre la forma exacta que podría tener (el acuerdo), pero existe la posibilidad de que alcancen un acuerdo (de paz) y espero que lo hagan”, afirmó Kim.
La firma de un tratado de paz, que alejaría para Pyonyang la posibilidad de un ataque o una invasión estadounidense, es junto con la rebaja de sanciones la principal demanda norcoreana, de cara a implementar un desmantelamiento de sus instalaciones nucleares.
Se espera que esta segunda cita con Trump sirva para dar un impulso al proceso de desnuclearización del régimen que ambos trataron en su primera cumbre de Singapur el año pasado y que apenas ha avanzado por la falta de una hoja de ruta.
Fuente: telam