Hilario Dos Santos (32) tuvo su primera oportunidad de recuperar la libertad hace cuatro años. Estuvo muy cerca, pero violó el régimen de salida transitoria y tras permanecer prófugo entre 2015 y 2018 fue capturado y tuvo que volver a la Unidad Penal III de esta ciudad.
Ayer, y llamativamente de nuevo cerca de cumplir los nueve años de condena en su contra, volvió a desaparecer. Esta vez dijo que “iba a sacar la basura” y en un descuido de los guardias no regresó y corrió descalzo hacia el monte. Ocurrió a las 7 mientras se realizaban trabajos de fajina (limpieza) en la periferia del presidio.
Es considerado por el Servicio Penitenciario Provincial (SPP) un “preso peligroso”, no solamente porque tiene antecedentes por fuga, si no por el motivo por el cual se halla purgando nueve años de prisión. En 2010 baleó a un hombre en la cabeza en un fallido asalto perpetrado en Jardín América.
Hilario no llevaba calzados pero sí tenía una ventaja sobre algunos de sus perseguidores: es un conocedor de la zona. Lo buscaban más de 250 efectivos -de la Policía y grupos especiales del SPP- logro zafar de sus perseguidores hasta hoy a las 3:30 hs cuando efectivos de la comisaría 1a lo sorprendieron y detuvieron mientras caminaba a la vera de la ruta Nacional 12, a la altura del puente Piray Guazú.
Escurridizo
Pocos minutos después de producirse la evasión guardias del SPP que realizaban un recorrido por la zona lo vieron caminando tranquilamente por la calle El Fundador -en cercanías al Kilómetro 9. Al notar la presencia de los efectivos ingresó nuevamente al monte y desapareció desatando un amplio operativo de rastrillaje.
Estaba con el torso desnudo y vestía pantalón de buzo. No llevaba calzados.
La primera fuga
En 2015 Dos Santos tenía el beneficio de salir de la cárcel durante algunos días, lo que se denomina en el régimen carcelario salidas transitorias. Dicen que solía frecuentar la casa de un familiar en El Soberbio.
El 19 de abril de ese año no regresó a la unidad penitenciaria. Finalmente y casi tres años prófugo fue recapturado por efectivos de Prefectura Naval, el 19 de diciembre de 2018.
Se le inició una causa por la evasión por lo que su estadía en la cárcel era por lo menos de otros tres años.
Bici asaltante
Con apenas 21 años Hilario apareció por primera vez en las noticias policiales cuando lo capturaron por cometer un violento asalto a mano armada. Fue el martes 15 de julio de 2008 en Jardín América, alrededor de las 19.20.
Ingresó en un kiosco ubicado en la calle Honduras casi Uruguay. Sin mediar palabras encañonó con un revólver calibre 22 a la única empleada que se hallaba en el lugar. Le sustrajo la recaudación del día -unos 300 pesos- tarjetas telefónicas y un teléfono celular Motorola V 300.
El solitario ladrón abordó su bicicleta e inició la fuga, pero la víctima salió a la calle y comenzó a pedir auxilio.
Dos ocasionales transeúntes persiguieron a Hilario, a quien derribaron de la bicicleta. En esas circunstancias el peligroso individuo extrajo el revólver y le efectuó un disparo a uno de sus perseguidores. Por milagro el proyectil apenas le rozó el cuero cabelludo.
El ladrón intentó seguir escapando y se ocultó en una carpintería, sin embargo fue capturado por la Policía. Tenía el arma y el dinero en su poder.
Un tiempo después, en 2010, fue condenado en un juicio abreviado donde confesó su culpabilidad en el citado hecho fue condenado a nueve años de prisión.