Los vecinos de las picadas Kolmaier y 10 de Diciembre no dudan en afirmar que “tener agua potable nos cambió la vida”. Es que luego de décadas las familias que viven a varios kilómetros de la zona urbana de Aristóbulo del Valle, al borde del Parque Provincial Salto Encantado, lograron acceder al agua potable que brinda la Cooperativa Cainguás Limitada (CEC Limitada) gracias a la decisión de la actual conducción de la institución que provee de este servicio a sus más de cinco mil asociados, además de otros esenciales como energía eléctrica, gas, sepelio y conectividad a Internet.
Ana Correa vive con su esposo y sus hijos a menos de mil metros del asfalto y con una alegría desbordante contó que “desde que empezaron a poner esos caños para nuestra picada empezó a cambiar nuestras vidas porque sabíamos que estaba ahí cerca de nuestras casas”.
La vecina no dudó en afirmar que se realizó mucho más en estos últimos tres meses que durante los últimos años, “a nosotros no nos quedan más que palabras de agradecimiento. Nos parecía increíble que el agua llegaba hasta el aserradero que está en el acceso y nosotros que estamos a 800 metros no teníamos esa posibilidad”.
Pocos días después de asumir los nuevos consejeros, en noviembre del año pasado, dieron prioridad a la obra que demandó una fuerte inversión en recursos económicos, personal técnico, además de las maquinarias para abrir paso a la red en una zona muy difícil por el tipo de suelo pedregoso existente.
Anteriormente, para tener agua destinada a las tareas de limpieza e higiene personal los colonos que poseen vehículo debían trasladarse a las chacras más cercanas de familiares o amigos que tienen estanques o algún arroyo para llenar tambores que les permitían paliar la situación por un par de días, para el consumo humano debían apelar a la solidaridad de aquellos que tenían algún pozo, al perforado de la escuela o cada quince días aproximadamente solicitar a la Municipalidad que acercara el vital líquido.
La población del lugar cuenta con una escuela primaria distante unos ocho kilómetros del acceso que posee un pozo perforado que en temporadas de mucho calor agotaba su abastecimiento. Por lo tanto, desde ahora también la institución contará con una conexión, donde además se instalará una canilla pública para el suministro a los vecinos.
El acceso a las colonias se encuentra sobre la ruta provincial 7, a unos seis mil metros del casco céntrico, hasta donde llegaba la red principal y desde donde comenzaron el tendido del nuevo tramo de alrededor de 6.500 metros de caños que permitirá que más de cuarenta familias que viven entre las picadas Kolmaier y 10 de Diciembre puedan tener sus conexiones domiciliarias a un valor muy accesible y con una amplia financiación que permite incluir a todos entendiendo y poniendo en práctica los valores del cooperativismo como ser ayuda mutua, igualdad, equidad y solidaridad.
En este sentido el presidente de la CEC Limitada, Héctor López Ricci, remarcó que “nuestro compromiso es con los socios, y estamos haciendo inversiones fundamentales para poder llegar a todos los sectores con servicios de calidad y accesibles que permitan continuar mejorando la calidad de vida de las familias de nuestro pueblo”.