La Selección Argentina de Futsal AMF-CAFS alcanzó el pasado fin de semana su segunda copa del mundo al vencer en la final, en un dramático partido, a Brasil por 3 a 2, en tiempo suplementario.
El sueño de repetir en la tierra colorada, el título que había logrado en el Mundial 1994 tras igualar agónicamente (faltando 6 segundos 2-2) con la canariña se cristalizó en Montecarlo, en donde miles de misioneros en un colmado estadio Municipal y miles de argentinos através de la Televisión Pública observaron el triunfo de los dirigidos por Ariel Avveduto con tanto de Gonzalo Pires.
La tierra colorada, que vivió una semana inolvidable, fue participe necesario del segundo título mundial para la Confederación Argentina de Fútbol de Salón (CAFS), que lo había logrado hacía 25 años atrás, también en Misiones, pero en Puerto Rico al vencer en la final 2-1 a Colombia, en aquel entonces.
La selección contó con un misionero en su formación: Sandro Antiveros, quien fue fundamental en la parte final. Marcó el primero frente los brasileños (el otro lo anotó Marcelo Mescolatti). Además otro misionero, Bruno Humada, concentró con el equipo nacional por la lesión de Pires, quien finalmente se recuperó de su lesión y terminó marcando el gol de la victoria sobre Brasil.
Sin dudas que el Mundial de Misiones fue todo un éxito, pues sirvió para un montón de cosas como por ejemplo: en lo deportivo, viabilizar al futsal auténtico de CAFS, la disciplina deportiva más federal y que tras el título se instaló en todos los medios del país y el mundo.
En el aspecto social fue un efecto movilizador importante para la provincia, ya que el público respondió en gran número y en lo estructural la infraestructura deportiva que queda.