
Un menor de diez años sufrió lesiones de distinta consideración al explotarle en una de sus manos un propulsor de mortero. Según las fuentes el niño encontró el peligroso dispositivo de uso de guerra en un basurero de su domicilio.
El lamentable episodio se registró este miércoles alrededor de las 10 en el Ñu Porá, Garupá.
Los uniformados tomaron conocimiento del hecho cuando la víctima ingresó al sector de Pediatría del hospital Ramón Madariaga.
Una vez en dicho nosocomio y tras entrevistarse con la madre del menor, de 35 años, la misma manifestó que todo sucedió en circunstancias en que se hallaba en su casa junto a su hijo, quien jugaba en el patio trasero. Incluso en esos momentos el chico era observado por su progenitor.
Fue allí que el niño revisó un basurero y se produjo la explosión. La madre dijo que escuchó un fuerte ruido, un estruendo. Al salir observó que su hijo estaba herido.
El niño estaba con su mano izquierda sangrando, por lo que rápidamente lo trasladó hasta el hospital de Fátima, donde le brindaron primeros auxilios, luego fue derivado hasta el Madariaga para una atención de mayor complejidad.
Fuera de peligro
El menor fue examinado por el médico policial en turno, quien diagnosticó que presentaba “heridas cortantes múltiples en dedo pulgar, medio y angular de la mano izquierda. Herida cortante de dos centímetros en pierna derecha, se ordenan estudios complementarios”.
Voceros del caso indicaron que el chico estaba fuera de peligro y que los facultativos le dieron el alta.
Pericias en la escena
Personal de la Policía Científica y de bomberos Garupá realizó las pericias de rigor en el domicilio donde se produjo el hecho, donde incautaron los restos del artefacto de fabricación militar.
Según los expertos de la fuerza se trata de un propulsor de mortero detonado normalizado, de características “cartucho ejercicio calibre 25 mm.., carga 2 P/SubcalMprt 81/129, Lot Mun 05FLB 14 Venc Julio 2019”.
Ahora los efectivos tratan de dilucidar cómo llegó el explosivo hasta ese terreno, más precisamente al basurero del patio trasero de una vivienda familiar.
Por el momento los investigadores se entrevistaban con vecinos e integrantes de la familia de la víctima para obtener pistas que permitan establecer quien abandonó el dispositivo militar en ese lugar.
Lo llamativo es que el propulsor conservaba toda la potencia para su funcionamiento, consignaron las fuentes.
En las imágenes que se difundieron del artefacto, se puede observar la nomenclaturas con datos de tipo, calibre, carga, fecha de fabricación (es de origen Argentino) y vencimiento (julio de este año).