El sábado pasado fue un día triste y desesperante para la familia de Viviana Coronado quienes residen en Pozo Azul. Salieron a cenar a la casa de unos amigos, con su esposo y sus cinco hijos y fue el momento en el que por motivos que aún se tratan de establecer, la casa en la que residían se incendió y “dijeron los vecinos que en 40 minutos se consumió hasta los cimientos”, contó a PRIMERA EDICIÓN.
“Por milagro no estábamos en casa, estamos todos bien y eso lo agradezco, pero perdimos todo, nos quedamos con lo puesto. La comuna nos prestó una casa, los vecinos nos donaron ropa, pero no tenemos más nada. Mis hijas perdieron todos sus útiles y tienen que volver al colegio, necesitamos ayuda“, dijo.
Las hijas de Viviana tienen 15, 13, 12, 10 y el bebé “ropa tenemos porque nos donaron, además de todo lo que necesitamos, lo más urgente es ropa para el bebé, los útiles para las nenas para que puedan volver al colegio y utensilios y muebles básicos, porque estamos cocinando con fuego afuera”, explicó la mujer.
El esposo de Viviana, Luis, es soldador y el incendio devoró sus elementos de trabajo, “está realizando una changa en la Iglesia del pueblo, pero perdió todas sus herramientas, así como yo que soy modista, perdí mis máquinas, hago de todo almohadones, toallas, ropa, cortinas, de todo, ahora tengo que empezar de cero”, dijo.
A los que quieran ayudar a Viviana y su familia con donaciones o trabajo, comunicarse al 3751 15661188, el celular se salvó del incendio, pero tiene problemas, “así que si llaman tengan paciencia porque la pantalla está rota, sólo llamadas por favor”, dijo.