Oberá Tenis Club (OTC) volvió, por tercera vez en la temporada, a San Francisco, provincia de Córdoba, donde hoy jugará el quinto partido de la serie de cuartos de final de la Conferencia Norte de la Liga Argentina de Básquet ante San Isidro. Impensado para algunos, la definición entre el primero de la Conferencia y el décimo, que viene de sortear la reclasificación en el quinto juego ante Villa San Martín en condición de visitante, llega a idéntica definición. Ahora sí, es a todo o nada.
En la comuna cordobesa se inició el cruce, con dos victorias contundentes del local, pero en Oberá el Celeste no sólo jugó de igual a igual al líder del Norte, sino que además consiguió los resultados que necesitaba con gran muestra de carácter y determinación. Hoy, como en todo encuentro decisivo, se potencian para ambos elencos todas las sensaciones, ansiedad, nerviosismo, obligaciones y la certeza de que sólo uno seguirá en competencia.
Además, se trata de la tercera vez que se encuentran en playoffs; antes había sido en instancias de octavos de final (la última en la temporada 2014-2015), por lo que se trata del primer cruce con ambos entre los ocho mejores de la Conferencia Norte.
La historia previa es importante pero no determinante, ya que las posibilidades, con una serie igualada, están intactas para ambos. Aunque haber sido el mejor del grupo, logro que ostenta San Isidro, genera la obligación de demostrar que esa circunstancia no fue casualidad.
“Sabemos que va a ser un partido durísimo, San Isidro tiene una localía fuerte, pero demostramos que podemos ganarles, que dependemos de nosotros”, confesó el capitán del elenco misionero, José Fabio, a EL DEPORTIVO.
Este equipo tiene un plus en partidos como estos, es una virtud. Creo que jugamos dos buenos partidos en casa, con mucha entrega y sacrificio y eso nos dio mucha confianza, sobre todo porque sabemos que ellos vinieron a llevarse la clasificación de Oberá. Cada uno tiene que hacer lo mejor que pueda para que esto sea un equipo. Nosotros queremos pasar”, agregó.
Los deseos de dar un paso más son los motores del equipo de Alejandro Kuperman. “Tengo mucha confianza en el equipo. El último partido fue sufrido pero dominado por nosotros. Tenemos muchas ganas y vamos a hacer todo lo posible. La tarea defensiva es fundamental y después tenemos opciones ofensivas. Creo que va a ser un juego diferente, pero que podemos” resolver a favor, sostuvo el entrenador del Celeste.
La exigencia fue máxima para ambos conjuntos, hasta los kilómetros recorridos igualan el contexto, pero además los protagonistas coinciden en que el trabajo de la temporada está proyectado para llegar a este momento.
“Puede ser para cualquiera de los dos. La localía es importante, pero encontramos la veta para ir por el triunfo. Hay que ir y jugar como lo hicimos en Oberá, dar todo, luchar por cada pelota como si fuera la última y vamos a ver qué pasa. Nada está dicho. Estamos frente a una gran posibilidad”, cerró Christian Schoppler.