Luego de cuatro incrementos en este año del precio de combustibles, llenar el tanque para movilizar un vehículo particular cuesta, en promedio, 2.000 pesos más que hace un año atrás y tomando como referencia el uso de dos tanques llenos por mes.
Teniendo en cuenta los importes definidos por la empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), realizar dos cargas completas de combustible, gasto promedio mensual para un usuario que utiliza el vehículo todos los días recorriendo tramos desde el microcentro hasta los barrios periféricos de Posadas, cuesta $1.810 más que hace doce meses con la nafta súper, mientras que la diferencia se estira con el producto Infinia a 2.044 pesos más de lo que se gastaba en el 2018.
En abril del año pasado el litro de nafta súper costaba $28,89, en tanto que la Infinia alcanzaba un valor de $31,95, en la capital provincial. Así, cargar un tanque de 50 litros de súper en un automóvil implicaba un gasto de 1.444,5 pesos (el promedio de gasto mensual al llenar dos veces el tanque ascendía a $2.889), y con el mejor producto el costo era de 1.597,5 pesos ($3.195 para llenar dos tanques).
Por su parte, con el cuadro tarifario actual, luego del cuarto incremento del 2019 que comenzó a impactar el último día de abril, en las estaciones YPF de Posadas el litro de nafta Súper vale $46,99 y el de Infinia $52,39. De esa manera llenar el tanque con el primero cuesta $2.349,5 (con el gasto promedio mensual de dos tanques sube a $4.699); mientras que con nafta Infinia se debe desembolsar $2.691,5 para llenar el tanque (y $5.239 para hacer la carga completa dos veces por mes).
Cabe recordar que a fines del 2015, cuando el presidente Mauricio Macri asumió su mandato, la nafta súper costaba $15,8 por litro y la Infinia $16,62. Con esos importes, para llenar el tanque dos veces en el mismo mes se necesitaban $1.580 con súper y $1.662 el otro. En la comparación con los costos actuales, para llenar el tanque en dos oportunidades con la nafta Súper se requerían $3.119 pesos menos que ahora. Mientras que en la opción de la Infinia costaba $3.577 menos que en la actualidad, según los valores de referencia de la empresa estatal YPF.
Variaciones con Diésel
La misma situación se repite con el combustible Diésel, teniendo en cuenta que desde principio de mayo cada litro cuesta $43,88, mientras que la Infinia Diésel alcanzó un importe de $51,43.
Hace un año, en las mismas estaciones YPF, el producto Diésel por litro valía $24,48 ($19,4 más barato que el precio actual), y la Infinia Diésel costaba $28,43 ($23 menos por litro).
En la comparación con las tarifas del 2015, cuando el Diésel se ubicaba en $12,91 y la Infinia Diésel en $14,69, la diferencia por cada litro se agranda a $30,97 y $36,74, respectivamente, más económicos que en la actualidad.
Reclamos de los clientes
Ante esta complicada situación los usuarios hacen escuchar sus quejas. “Es muy complicado usar el auto últimamente. No se puede bancar el precio que están cobrando para cargar nafta. Lo que hacen las empresas es un ataque directo a sus clientes porque mucha gente necesita sus vehículos todos los días, ya sea por obligaciones laborales o para llevar a sus hijos a la escuela, por ejemplo.
Lastimosamente a nosotros no nos queda otra que aceptar y seguir pagando, como sea”, señaló un automovilista a PRIMERA EDICIÓN, mientras veía con preocupación subir el importe que debía pagar por el combustible que estaba cargando a su auto en una estación de servicio.
“Yo estoy tratando de usar cada vez menos el auto”, señaló otro usuario y agregó: “Pasa que en algunas ocasiones es indispensable sacar el vehículo, por obligaciones, apuro, días de lluvia o emergencia. Sin embargo cuando puedo me muevo de otra manera, caminando o en colectivo, porque es imposible destinar tanto dinero a la nafta”.
En tanto, otro automovilista dijo con resignado humor “antes con un billete de 500 pesos cargaba más de la mitad del tanque, ahora con la misma plata apenas se mueve un poco la aguja del tablero que muestra lo que se cargó”.
Al mismo tiempo, consultado por este Diario, un empleado de la estación de servicio confirmó que “existe una caída de la demanda, es una tendencia que viene de hace muchos meses. Notamos mucho malestar en la gente por los precios, principalmente cuando los aumentos son recientes, afortunadamente la mayoría entiende que no es culpa nuestra y no se agarran con nosotros, los trabajadores, pero sí nos hacen saber sus quejas”.
“También notamos que cada vez son más los clientes habituales que dejaron de cargar la nafta Premium y se pasaron a la Súper, y son muy pocos los que solicitan llenar al tanque. Van cargando de a poco porque es evidente que no hay plata en la calle”, cerró el usuario.
Marcado descenso en la venta de combustibles de calidad premium
De acuerdo a los datos oficiales relevados hasta marzo por la secretaría de Energía de la Nación, el mercado de los combustibles experimenta una caída de seis meses consecutivos, en la que se genera una fuerte migración del consumo de productos de máxima calidad a los tradicionales.
Se debe a la pérdida del poder adquisitivo de la sociedad argentina. Al respecto, el presidente de la Federación Argentina de Expendedores de Nafta del Interior (FAENI) remarcó que la migración a los productos regulares “golpea fuerte a la economía de las expendedoras. El aumento del combustible en el último año prácticamente duplicó la suba de la inflación y eso explica el paso de las Premium a regulares”.
Por su parte, Cristian Folgar, exsubsecretario de Combustibles de la Nación, indicó: “Se entiende esta migración porque en general la capacidad de compra se ha reducido mucho, y esto repercute fuerte en el margen de rentabilidad de las estaciones de servicio”.
Más aumentos
La problemática se agudizará para los automovilistas que necesitan utilizar sus vehículos debido a que, según indicaron desde distintas empresas del mercado, la diferencia entre el precio de paridad de importación – el de referencia – y el valor local continúa atrasada entre un 7% y un 20%. Motivo por el cual anticiparon que próximamente se registrarán nuevos incrementos en las tarifas de los combustibles en todo el país.
El retraso en los precios se debe a las últimas variaciones del dólar y el precio internacional del crudo de petróleo, que acumula un aumento del 48% en pesos, remarcaron desde el sector empresarial.
Desde la Federación de Expendedores de Combustibles (FECAC) adelantaron que en el próximo mes de junio habrá un aumento al menos del 12% en los precios del combustible.
Por ello, exigieron al Gobierno nacional que se esfuerce en lograr un acuerdo con el sector que sirva para frenar las elevadas subas que luego se transforman en una expansión de la inflación.
En ese sentido, Gabriel Bornoroni, presidente de la FECAC, recordó que al finalizar el año pasado se alcanzó “un punto de equilibrio a nivel internacional, y no había atraso” entre el dólar y el precio internacional del petróleo.
Sin embargo, resaltó que en lo que va de este año, “subió más rápido el dólar y el crudo que los aumentos que tuvimos en los carteles”.“Por ley, hace dos años que cada tres meses, de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor (IPC), aumentan los impuestos. Ahora tocaría el primero de junio. Sí o sí van a aumentar los precios de los combustibles, sería un 12%” recalcó.