Aunque con derrota, la Selección Misionera U15 de Básquetbol se despidió ayer del Torneo Argentino de la especialidad con la frente en alto. Es que el representativo terminó en la décima posición y cumplió así la meta que se había propuesto, la de mejorar el 15º puesto que había alcanzado en 2018.
La selección venía de ganarle el domingo a La Rioja por 72-53, resultado que le permitió meterse en la discusión por el noveno puesto. Ayer, en el estadio del club Regatas de Santa Fe, los chicos no pudieron con Chaco en el duelo regional y perdieron por 85-49. Pese a ello, el adiós no fue tan amargo.
“Cumplimos nuestro objetivo. Nos habíamos puesto como meta última ganar hoy para dejar a Misiones en lo más alto y terminar novenos. No se dio, pero bueno, culminamos entre los diez primeros, que es lo importante, porque cumplimos con creces la meta que nos fijamos en la previa”, dijo ayer, tras el partido, el entrenador Mauricio Magri.
En diálogo con EL DEPORTIVO, Magri resaltó “la garra y entrega de los chicos, que dejaron todo, pese a que no están acostumbrados a jugar partidos de este nivel durante todos los días. Se mostraron correctos dentro y fuera de la cancha y dejaron todo por la camiseta de Misiones”.
El entrenador reconoció que también para él fue una experiencia nueva, ya que es la primera vez que participa en un Argentino U15 como entrenador principal. “Ahora nos queda volver a casa y seguir trabajando para mejorar nuestro nivel, con la idea de que el día de mañana podemos estar en la misma línea que las provincias más fuertes, como Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba o Santa Fe”, reconoció el también técnico de Bartolomé Mitre.
Ayer por la tarde, tras el cierre del torneo para Misiones, la delegación emprendía el regreso a casa con el objetivo cumplido.