En Misiones está prohibido por ley el uso de leña de bosques nativos para alimentar las calderas de secado desde inicios de 2015. De esa época en adelante las industrias realizaron modificaciones e inversiones en los quemadores con el fin de funcionar a base de chips de madera, que se obtienen como residuo de la forestoindustria.
Sin embargo, el método del chipeo masivo puede generar a corto plazo una faltante y esto preocupa a los industriales; ya que muchos secaderos todavía no pusieron en marcha la totalidad de calderos.
Es así que ante la escasez algunos se vuelcan a comprar pellets, que son un tipo de combustible granulado alargado a base de madera, pero está valuado en dólares por lo que la rentabilidad no es la misma.
Pablo Klingbeil, del secadero El Aguante de Oberá, comentó que “aquí tenemos un consumo de 80 toneladas a diario de chips, ya que se usa 4.000 kilos por hora.”.
Ante la gran demanda, tienen varios proveedores de localidades cercanas como ser Alberdi, Campo Grande y la vecina provincia de Corrientes. “Una faltante mínima ya nos afecta”, sostuvo.
En este punto, recordó que “cuando en verano trabajen las dos plantas juntas se consumirá mucho más kilos, por eso creemos será un problema provincial la falta de chips y esto se tiene que abordar”.
Klingbeil manifestó que “acá empezamos a trabajar con pellets, mezclando el 10% dentro de la biomasa para analizar qué alternativas tenemos y esto nos dio un buen funcionamiento”.
Aunque reconoció que “el problema es la rentabilidad porque los pellets se venden en dólares y valen cuatro o cinco veces más que el chip”. Consideró que “eso imposibilita su uso masivo”.
Por ello, momentáneamente en el secadero sólo se sigue chipeando.
Insistió en que “los mercados se van a complicar porque cada vez son más los secaderos que pasan de leña a chips”.
Además, dijo que se debe considerar que “la transformación también llega a las tealeras, madereras, pasteras o las empresas que generan luz. Es decir que todas se vuelcan a algo único que es el chip”.
Extensión a otros rubros
En lo que concierne a la faltante, el director de Secaderos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), Sergio Delapierre, dijo que “hay zonas de la provincia que tienen problemas para conseguir chips”.
En este sentido, detalló que lo que sucede es que este biocombustible también se ocupa para “la pasta celulósica y hay empresas que están produciendo energía eléctrica a partir de su combustión”.
En consecuencia, aseguró que “este problema de faltante se mantendrá hasta que se reactive un poco más lo relacionado a la industria de los aserraderos”.
En la región se contabilizan aproximadamente unos 190 secaderos entre Misiones y Corrientes.
En relación al uso de chips, Delapierre apuntó que en la tierra colorada aproximadamente el 90% de los secaderos lo utiliza. “Todas las empresas más grandes tienen quemadores preparados para esto”, subrayó. Y añadió que en Corrientes “tenemos conocimiento de que utilizan eucaliptus en toras”.
Regulación en Misiones
En Misiones está en vigencia la Ley XVI-106 que instituye un marco regulatorio de los Recursos Dendroenergéticos Renovables.
El subsecretario de Desarrollo Forestal del Ministerio del Agro de Misiones, Juan Gauto, comentó que la dendroenergía deviene de los bosques o árboles y “en Misiones está bien regulada porque sumado a las leyes de manejo forestal, también está el marco regulatorio de los recursos energéticos”.
En consecuencia, subrayó que “acá se da una fuerte mirada a la energía térmica”.
En esta línea entra lo relacionado a “lo tradicionalmente era leña para las secar hojas de yerba o de té”. Como así también la leña que se utilizaba para los secados rudimentarios en la agroindustria local.
Asimismo, expuso que dicha normativa tiene como objetivo “buscar la sustentabilidad en el recurso de la biomasa dedicada a la energía térmica, ya que estaba siendo insostenible”.
Se trataba de una problemática importante ya que se registraba en Misiones una tala rasa de bosques nativos degradados. “Esto implicaba una promedio de 7.000 hectáreas año”, apuntó.
Asimismo, sostuvo que “se trata de una normativa única que permite y posibilita políticas muy activas”. Ejemplificó que entre las tareas que se realizan en la tierra colorada están “el pulmón de plantaciones forestales destinado a energía para secaderos de yerba mate, de té y para carbón vegetal”.
Mientras que a nivel nacional hay normativas y planes forestales a través de cuales pretenden “bajar el consumo basado en hidrocarburos y migrar hacia un consumo más sostenible”.
Tecnificación en los procesos de secados
El uso de chips está contemplado en la Resolución 007/19 con fecha 17 de enero de 2019 y se enmarca en el Plan de Tecnificación del Proceso de Secado.
A través de éste se incentiva la instalación del sistema de combustión de chip de biomasa en reemplazo del uso de leña en el secado de yerba mate.
De esta manera, se logra la reconversión parcial de la línea de secado y el mejoramiento de las condiciones de trabajo en los secaderos.
Asimismo, especialistas en la temática indican que hay un buen resultado en la instrumentación del mecanismo. Por ello, se brinda beneficios para la adquisición de quemadores con la intención de ampliar la posibilidad de optimizar dicha etapa de elaboración de la yerba mate.