Con una inversión de nueve millones de pesos aproximadamente, el municipio y el Iprodha construyeron el Paseo de los Artesanos para esta ciudad que se destaca por las Reducciones Jesuíticas.
Son 54 trabajadores, entre los que se cuentan ocho artesanos que producen y venden sus creaciones y los demás son revendedores que hace años trabajan en el espacio que estaba en los alrededores de las reducciones, según explicó el intendente Juan Esteban Romero a PRIMERA EDICIÓN.
“Ahora estarán mucho más cómodos, con todos los servicios, luz, agua, sanitarios para damas, caballeros y personas con discapacidades. La construcción es de mampostería con pisos y está a 30 metros de las reducciones y de donde trabajaban antes”, dijo el jefe comunal a este Diario.