
Bajo la premisa de que una alimentación saludable y hacer al menos 30 minutos diarios de actividad física reduce un 40% el riesgo de enfermar de cáncer y otras patologías, la Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer (LALCEC) lleva adelante la Semana de Hábitos Saludables para concientizar sobre la importancia de incorporarlos en la rutina familiar.
En diálogo con El Aire de las Misiones de la 89.3 FM Santa María de las Misiones, la presidenta de LALCEC Posadas, Rosaura Sfeir, y la licenciada en Nutrición María Cecilia Marín advirtieron que la clave es la elección de los alimentos y el consumo de la porción justa de los mismos.
“Todos tenemos los genes que pueden llegar a codificar el cáncer, pero está en nosotros prender o apagar esa información para que se active o no el cáncer. Mantener hábitos saludables permite que esos genes se mantengan apagados o atenuados más tiempo”, aseguró Marin.
Los hábitos saludables permiten no sólo prevenir el cáncer sino también otras enfermedades como la diabetes y la obesidad.
Incorporar hábitos saludables permite modificar los factores de riesgo que predisponen a las personas a enfermar, “las grandes enfermedades del momento son el sobrepeso y la obesidad que se puede prevenir y tratar con hábitos alimentarios saludables y actividad física”.
Cáncer de colon
Hay algunos tipos de cáncer, como el de colon, que están directamente vinculados con la alimentación, “el cáncer de colon es muy prevalente en Argentina, mucho más que en otros países, y eso tiene mucho que ver con el tipo de alimentación por la cantidad de tiempo que están en contacto las sustancias tóxicas presentes en alimentos no saludables con la pared del colon”, detalló la especialista en nutrición.
Una de las medidas a tener en cuenta para prevenir este tipo de cáncer es no consumir el asado muy cocido, “con esa costrita tostada”, señaló Marín al tiempo que recordó que, pese a la crisis, el argentino promedio consume más carne de la recomendada “es una cuestión cultural, los argentinos tenemos una dieta muy proteica y no consumimos la porción de frutas y verduras recomendadas. De acuerdo a la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR), comemos sólo 2 de las 5 porciones diarias de frutas y verduras recomendadas”.
Qué alimentos hay que comer y cuánto
Para Marín, no sólo hay que saber qué alimentos se deben comer sino también la “porción justa” que hay que incorporar en cada comida.
A nivel Nación se desarrollaron las guías alimentarias para la población argentina que son una gran herramienta; cuentan con diez mensajes claves y una gráfica de alimentación.
Ya no hablamos de la pirámide alimentaria, en Argentina usamos la imagen de un plato que marca las proporciones de los distintos grupos de alimentos en función de los nutrientes que aportan: la mitad del plato debe estar ocupado por frutas y verduras (cinco porciones al día), un cuarto del plato con proteínas (carnes, legumbres y huevos) y el otro cuarto con un cereal (arroz, soja).
En cuanto a las grasas, la nutricionista diferenció las grasas buenas (aceites crudos, frutos secos, semillas, palta), de las trans e hidrogenadas (manteca, grasa de cerdo, margarina, grasa de la carnes, la piel del pollo y en casi todos los productos de panadería que utilizan estas grasas como insumo).
“Aconsejamos retirar las grasas visibles de las carnes y no agregarles más grasas (aceites, manteca) al cocinar. Cuando se consume aceite, es recomendable que sea crudo pero no en frituras porque al calentarse se rompen sus moléculas y se convierten en un tipo de grasa que va directo a las arterias. La idea es reducir el consumo de grasas trans, pero eso no quiere decir que no podamos comer un rulito de manteca arriba de una tostada… la idea es la porción”, recordó.
Panorama actual
Pese a las campañas, Marín señaló que aumentó el consumo de sal en la población argentina, también se incrementó el sobrepeso y la obesidad, el nivel de sedentarismo... el 60% de los argentinos no hace ni siquiera 30 minutos de actividad física diaria. Pese a ello, la profesional destacó que nunca es tarde “porque los hábitos se construyen, si podemos incorporar buenos hábitos desde niños mejor, pero nunca es tarde para sumarlos”.
La profesional recomendó a las personas reservarse su tiempo para cocinarse en sus casas, “implica más organización y planificación de lo que se comerá durante la semana que tiempo de cocina propiamente dicho; pero si no es posible, lo mejor es pedir una vianda saludable. En la actualidad hay muchos colegas nutricionistas que ofrecen este servicio”.
“El mate no es desayuno”
Al igual que sus pares, Marín defendió la importancia del desayuno para recargar al organismo de las energías necesarias para funcionar durante las primeras horas del día. Por ello, aseguró que “el café bebido o el mate, desayuno de muchos misioneros, no son buenos porque no aportan nutrientes. La energía viene de la comida”.
A los que tienen poco tiempo para desayunar, aconsejó preparar la noche antes el desayuno: “Se puede dejar el pan o las tostadas y la mermelada ya en la mesa”. A los que dicen que les hace mal comer algo tan temprano, sugirió “que reemplacen la leche o el yogur del desayuno por una fruta, un huevo o unas galletitas con queso. Lo importante es no salir con el estómago vacío”.
“Las dietas de moda son moldes que no se adaptan a todas las personas”
Consultada sobre las dietas de moda, como en la actualidad la “cetogénica”, Marín indicó que el problema es que “ninguna de esas dietas se adecuan a una persona.El gran maestro de la nutrición, Pedro Escudero, determinó las cuatro leyes de la alimentación: cantidad (porción), armonía (distribución de los nutrientes), calidad y adecuación.Esta última ley significa que un plan alimentario debe adaptarse a cada paciente, en función de su situación y su vida, si está embarazada, si está trabajando, sus ingresos, su situación de salud y su cultura. Por eso, recomendamos evitar estas dietas de moda porque lo que le funciona a una persona no siempre le sirve a otra. Lo mejor es consultar a un profesional matriculado”.