“Cuando era adolescente tuve miedo a que, cuando creciera, me quedara sin imaginación, porque los adultos parecían grises y amargados. Para intentar evitarlo, agarré una hoja grande, la dividí en 70 cuadritos y en cada uno hice un personaje para tener un reservorio de criaturas fantásticas para cuando creciera y me quedara sin imaginación. Nunca los usé”, contó Chanti a PRIMERA EDICIÓN.
Santiago González Riga, más conocido como “Chanti”, comenzó a dibujar antes de aprender a escribir. “Mis hermanos más grandes me escribían los globitos, porque yo no sabía”. Siendo tan pequeño, sus principales influencias fueron la televisión y las historietas que leía.
A los 16 años comenzó a publicar algunas historietas en diarios, pero eran no rentadas. Recién a los 21 comenzó a trabajar profesionalmente en un diario local de San Juan.
Siendo un joven artista del interior, a “Chanti” no le fue nada fácil insertarse en el ambiente. “Ahora quizá no cuesta tanto gracias a internet porque podés mostrar tu trabajo en cualquier parte que estés”. En cambio, Chanti viajaba constantemente de Mendoza a Buenos Aires en ómnibus, con sus carpetas llenas de dibujos y sueños.
Las puertas se abrieron
“Lo positivo de Buenos Aires es que, a pesar de que hay más dibujantes e historietistas, hay más lugares para publicar y son más abiertos que en el interior. Porque para triunfar en las provincias, primero tenés que ser reconocido en Buenos Aires”, dijo.
Los primeros trabajos que tuvo en la capital nacional, fue en la revista de la Fundación Vida Silvestre donde trabajó durante once años, publicando historietas acerca de animales en peligro de extinción.
Además, trabajó en Billiken. “Me contrató una persona súper piola” que con sólo ver un dibujo, vio su potencial. En la revista “La valijita”, creó personajes como Facu y Café con Leche y Pico Pichón.
Sin embargo, Chanti quería llegar a más gente. “Las revistas para las que trabajaba eran sólo para chicos chiquitos y yo quería publicar en una que pudieran leerla todos, el público en general”, manifestó.
El éxito de Mayor y Menor
Así fue como sus publicaciones llegaron, después de muchas idas y vueltas, a “Rumbos”, una revista mendocina. “El director no me podía atender, así que me dijeron que le dejara sólo un dibujo mío para que conozca mi trabajo. Le dejé uno de ‘Mayor y Menor’ porque imaginé que al ser más familiar, podría tener más impacto”, explicó.
En el 2003 comenzó a publicar en Rumbos las historietas de “Mayor y Menor” que “eran fuera de lo común, porque no son un chiste de dos o tres cuadritos, sino historias largas que continúan en el tiempo y en las que sus personajes que crecen con los lectores”, contó.
“La gente se enganchó tanto que me comenzaron a pedir el libro”, expresó. Luego de unos años, el libro de “Mayor y Menor” fue publicado con la editorial Sudamericana. “Creo que el éxito tuvo (y tiene) que ver con la identificación, porque son situaciones que pasan en cualquier familia”.
Fuentes de inspiración
“Siempre quise hacer historietas con chicos como protagonistas, porque me gusta mucho su forma de pensar. Me llevo muy bien con ellos”. En particular, Chanti habló de la relación que tiene con sus sobrinos y cómo se llevan entre ellos. “El nombre de los personajes son de mis sobrinos”, mencionó.
Personajes favoritos
“No tengo uno favorito, porque mis dibujos son como mis hijos, no puedo elegir uno”, aseguró aunque confesó que “de Mayor y Menor me gusta mucho Toby. De él querría tener su inocencia y la capacidad de asombro, que es lo que perdemos los adultos. Cuando sos chico no te importa nada, eso me gustaría tener: ese entusiasmo que a mí se me despierta cuando estoy con niños”.
Sin embargo, el personaje con el que más se identifica es Nacho: “es más parecido a mí porque no le gusta el colegio, es muy imaginativo y distraído”.
Las historietas como herramientas de comunicación
“Lo mejor es que vas comunicando determinadas cosas. Se trata de contar de manera divertida con un mensaje indirecto. Siempre trato de aportar algo aunque dejo que las personas saquen sus propias conclusiones”, afirmó.
Empero, el dibujante también destacó que sus historietas son humorísticas y no un manual de cómo debe comportarse la gente. “Que de vez en cuando yo quiera dejar algún mensaje, no significa que yo tenga que enseñarle a la gente cómo vivir”.
Próximos proyectos
Chanti está trabajando en una serie de cuatro libros de novelas gráficas. Se trata de historias largas sin que hayan sido publicadas por entrega y se llamará “La saga de los distintos”, en donde los protagonistas son animales de la Argentina.
El primer libro ya está escrito, aunque sigue en proceso de edición, y sus personajes tienen mucho que ver con nuestra selva misionera.
Acerca de la muestra
La muestra podrá ser visitada hasta el 1° de septiembre en Sala PB del Centro de Arte del Parque del Conocimiento (Av. Ulises López). Los horarios de visita son de martes a viernes de 8 a 18 hs, y sábados y domingos de 15 a 20 hs.