El detenido por el triple crimen de San Pedro finalmente recibió el alta médica ayer, poco después del mediodía y tras permanecer 21 días internado en el hospital Ramón Madariaga de esta capital.
En forma inmediata y en medio de un fuerte operativo de seguridad fue trasladado a San Vicente, donde continuará detenido y a la espera de ser indagado por el juez de Instrucción 3 de esa ciudad, Gerardo Casco.
Fuentes de la investigación señalaron que Silvio Mogarte (27) podría ser indagado en las próximas horas por el citado magistrado.
En ese sentido y tal como se adelantó, el joven ya cuenta con defensor oficial asignado desde hace varios días, por lo que no habría impedimento para que se concrete la medida judicial.
Mogarte está imputado por “femicidio” y “doble femicidio vinculado”, tras ser arrestado por la muerte de su expareja, Raquel Pereira (22) y de los dos hijos de la joven, Thiago Joaquín Burgin Pereira (3) y Yeferson Aníbal Pereira (8).
El brutal episodio se registró el pasado miércoles 7 de agosto en Colonia Fortaleza, ubicada a unos 25 kilómetros del casco urbano de San Pedro.
De acuerdo a la investigación, aquel día, a media mañana, el joven irrumpió en el patio de la humilde vivienda de Pereira, que estaba junto a su dos hijos. Entonces se desató la masacre.
Según estableció la policía en base a numerosas pericias, una vez cometido el crimen, el acusado intentó quitarse la vida primero con un rifle de aire comprimido adaptado para municiones calibre 22. La bala le destrozó el paladar y salió por una de sus mejillas.
Al no tener éxito se hizo un corte de 20 centímetros en el cuello con un cuchillo de cocina tipo Tramontina, pero tampoco logró su objetivo. Fue así que tras pedir ayuda a un vecino terminó siendo trasladado a la comisaría Segunda (ubicada en colonia Terciados Paraíso) y de allí a un hospital de área.
Luego estuvo internado en Posadas hasta que ayer finalmente le dieron el alta. Según familiares de las víctimas, Mogarte tuvo una corta relación con la joven -de casi tres meses-, hasta que ella decidió terminarla.
Luego del lamentable suceso familiares, vecinos y allegados a la mujer y los dos pequeños realizaron marchas en pedido de justicia.