Lautaro Comas, a los 35 minutos de la primera etapa, le dio el triunfo al elenco mesopotámico.
El reciente antecedente por la Copa Argentina parece haber influido directamente en la táctica pergeñada por el sagaz entrenador local Mario Sciacqua.
Si bien el “Patrón”, a diferencia del partido disputado en la semana por la Copa Argentina dispuso a todos sus titulares, no pasó desapercibida para el cuerpo técnico del dueño de casa la capacidad individual de su rival.
Con otros protagonistas el elenco entrerriano inició el cotejo un tanto tímidamente para luego ir soltándose en la misma medida que el contradictorio “Diablo” de Sebastián Beccacece dejaba en evidencia una palpable involución en su juego respecto a un auspicioso comienzo del match.
Manejado por la ubicuidad de Lucas Romero, el despliegue de Domingo Blanco y con la peligrosidad de Palacios y Pizzini en ofensiva, Independiente impresionó mejor al principio hasta que Patronato se plantó con suficiencia en el terreno y en base a la prodigalidad de sus jugadores emparejó el desarrollo hasta terminar el período inicial con pleno dominio del mismo.
Producto de ese mejor andar, el anfitrión consiguió la apertura del marcador tras un yerro del rudimentario Barboza Ullúa, quien en una salida en falso le “regaló” un balón al astuto Ávalos para que éste habilite a Comas, quien tras una veloz corrida por izquierda sometió al indefenso Campaña con un remate alto.
El complemento siguió mostrando a un “Rojo” tan tibio como predecible que se encontró con la mejor versión de un “Patrón” con una autoestima por las nubes que no se apartó nunca de su primigenio plan de juego.
Con el influyente Ávalos como bandera, más la ubicuidad de Chicco y el esfuerzo mancomunado del resto, el cuadro local dominó futbolística y psíquicamente a un oponente envuelto en un mar de dudas que casi nunca colocó en aprietos al guardavallas Matías Ibáñez.
Dio la sensación que el inquieto orientador táctico de la visita demoró en demasía las sustituciones, habida cuenta de la absoluta carencia de cambio de ritmo que experimentó el conjunto de Avellaneda en casi el trámite de mitad de cancha en adelante.
Ausente Pablo Pérez, carente de peso ofensivo con el intrascendente Martín Benítez en una posición de delantero que claramente no lo favorece, el “Rey de Copas” dependió exclusivamente de algún rapto de inspiración del esmerado Sánchez Miño, quien debió trasladar en demasía ante la falta de interlocutores a la hora de tocar.
En un claro paso en falso respecto a la estupenda actuación que tuvo ante Colón en el Libertadores de América, Beccacece sigue penando por la irregularidad de su plantilla, que fluctúa entre rendimientos esperanzadores como el del fin de semana anterior a otros decepcionantes como el de esta tarde.
Un Patronato plenamente consciente de sus limitaciones, se colocó el overol y lo venció con armas nobles y de manera justificada, obteniendo tres puntos de oro en su lucha por incrementar su algo raquítico promedio.
Síntesis
Patronato: Matías Ibáñez; Cristian Chimino, Federico Mancinelli, Matías Escudero, Mathías Abero; Lucas Mancinelli, Dardo Miloc, Julián Chicco, Lautaro Comas; Cristian Tarragona y Gabriel Ávalos. DT: Mario Sciacqua.
Independiente: Martín Campaña; Fabricio Bustos, Nicolás Figal, Alexander Barboza Ullúa, Juan Sánchez Miño; Domingo Blanco, Lucas Romero, Pablo Pérez; Francisco Pizzini, Martín Benítez y Sebastián Palacios. DT: Sebastián Beccacece.
Gol en el primer tiempo: 35m. Comas (P).
Cambios en el segundo tiempo: 7m. Cristian Chávez por Pizzini (I), 15m. Gastón Silva por Barboza Ullúa (I), 29m. Pablo Cortizo por Ávalos (P), 36m. Cecilio Domínguez por M. Benítez (I), 40m. Santiago Briñone por L. Mancinelli (P), 43m. Juan Franzoni por Tarragona (P).
Fuente: Agencia de Noticias NA