
El sector yerbatero sigue sorprendido por la noticia publicada el domingo pasado por PRIMERA EDICIÓN donde se informó que tres grandes empresas argentinas están negociando la posible compra de materia prima a productores de Itapúa (Paraguay).
Al respecto, ayer dieron su punto de vista dos referentes del rubro, quienes en declaraciones a FM de las Misiones 89.3 señalaron que “no debería incidir en los precios fijados por el INYM (Instituto Nacional de Yerba Mate)”.
Gerardo Vallejos, presidente de la Federación de Cooperativas Agrícolas de Misiones (Fedecoop) y director del INYM por las cooperativas reconoció que la novedad lo sorprendió pero cree que es una situación excepcional que “no debería generar ninguna corrida en el precio”.
“El mercado ha estado pagando por arriba de los precios oficiales, pudo haberse perdido alguna fidelidad de proveedores con alguna empresa, pero no creo que afecte en los precios” dijo el empresario y agregó que “hay que ser prudente. No creo que la disminución, si es que hubiera en la materia prima, pueda provocar una corrida de tal magnitud que tengamos que proveernos de mercado foráneo”.
Al respecto de la calidad del producto paraguayo, Vallejos aclaró que “cada empresa tiene su protocolo de calidad y recepción, seguramente se hará la revisión de materia prima a ver si se ajusta a los protocolos de calidad, maduración, polvo, palo, astilla, etc, si son aprobados por cada empresa no habría ningún problema”.
“No quiero provocar alarma, creo que no tendríamos porqué preocuparnos. Se trata de una cuestión excepcional”, remarcó el dirigente cooperativo.
Por su parte, Esteban Fridlmeier, representante del Gobierno de Corrientes en el INYM, reconoció que hay faltante de materia prima en Argentina y que “si hubiera suficiente nadie iría al Paraguay porque los precios no son baratos, entre 1.400 y 1.800 guaraníes el kilo de hoja verde es casi el mismo precio que acá, no hay ventaja de precios” (sería entre 14 y 18 pesos con el cambio a 100 guaraníes por peso).
Lo que ocurre, dijo Fridlmeier, es que “las empresas tienen que cumplir con los clientes y facturar una determinada cantidad por mes para cubrir sus obligaciones”. Por eso buscan materia prima ante la escasez en la Zona Productora.
Al respecto de la calidad de la producción guaraní, opinó que “si los parámetros de calidad se cumplen (las empresas) están en su derecho de importar yerba”. Agregó que “yo no soy quién para decir si la yerba paraguaya es buena o no, pero si cumplen con los parámetros no debería haber problema”.
Reconoció el dirigente correntino que “es algo inédito para mí. Desde la época de (dictador Juan Carlos) Onganía que no se importaba yerba porque estaba prohibida la cosecha”.
Sobre las causas de la decisión de las empresas, explicó que la zafra de este año va a ser similar al año pasado, superior a los 800 millones de kilos, pero “la demanda viene creciendo, tanto en las exportaciones como también en el mercado interno” y eso se debe a “las inversiones y la búsqueda de nuevos mercados que está dando sus frutos”.
“Es similar la producción pero creció la demanda, la exportación y el mercado interno también. Eso es bueno”, remarcó.
Por último descartó que se produzca una movida en el precio a causa de esta posible compra al Paraguay: “Si fuera que la yerba argentina queda en la planta porque Paraguay ofrece mejores precios podría ocurrir (cambios en el precio) pero no es un tema de precio sino de (falta de) producto”.
Primicia y sorpresa
PRIMERA EDICIÓN publicó en exclusiva el domingo que por la falta de materia prima, tres grandes firmas argentinas comenzaron a realizar consultas sobre los precios a los productores de Paraguay para comprarles yerba mate. Uno de los motivos principales sería la gran demanda insatisfecha que existe en Misiones. Las firmas que están consultando son Rosamonte, Las Marías y Molinos, según lo reveló Eduardo Oswald, presidente del Centro Yerbatero Paraguayo.
Es considerado algo excepcional teniendo en cuenta que la yerba es una de las producciones principales de la Zona Productora (Misiones y Norte de Corrientes) y sería la primera vez que ocurriría.
La preocupación entre los productores pasa por el hecho de que se puedan modificar los precios o, con el tiempo, la yerba paraguaya pueda llegar a reemplazar a la argentina.