Efectivos de la UR-VII investigan un robo que habría sido perpetrado a mano armada en la sucursal de una reconocida embotelladora. El hecho ocurrió minutos antes de las 6 de este lunes, en un local ubicado sobre la avenida 9 de julio de esta localidad.
La denuncia fue efectuada por un hombre de 41 años, empleado de la firma, quien indicó que llegó a su lugar de trabajo a las 5.15 a bordo de una motocicleta, la cual la dejó estacionada en el tinglado del predio.
Cuando se dirigía hacia la oficina fue sorprendido por un sospechoso que le apoyó un elemento contundente en el cuello, el cual entendió que podía tratarse de un arma de fuego.
La víctima alcanzó a ver que quien lo amenazaba era una persona que tenía puesto un casco de color blanco. Seguidamente, bajo amenazas, lo llevo hacia el fondo y lo obligó a ingresar a la oficina exigiéndole que le entregara dinero.
En la prosecución de su relato dijo que el malechor, al ver que había una especie de caja fuerte lo conminó a que la abriera. Sacó los billetes que había dentro del cofre y le entregó una suma aproximada a los 100 mil pesos en efectivo.
Ya con el botín en sus manos el delincuente lo hizo tirar al piso para luego escapar del lugar con rumbo desconocido.
Minutos después, la Comisaría Primera tomó conocimiento del hecho y efectivos del comando Radioeléctrico y la Brigada de Investigaciones comenzaron con la búsqueda del sospechoso.
En las primeras averiguaciones pudieron saber que el local asaltado posee cámaras de seguridad, pero estas funcionan a través de un sistema centralizado de monitoreo, el cual se encuentra en otra localidad.
Los registros iban a ser analizados con la intención de poder identificar al sospechoso. La víctima, quien temió ser agredido no llegó a mirarlo directamente.
En tanto, no descartan revisar las cámaras de seguridad del municipio en busca del rastro del autor del robo.