Tras la renuncia de Evo Morales y de los altos mandatarios del país, Bolivia quedó sumida en una gran incertidumbre acerca de lo que ocurrirá en los próximos días. Ante esta situación, y la poca información oficial que se tiene, “El Aire de las Misiones” se comunicó con Fernando Molina, periodista boliviano, quien explicó como fueron las primeras horas después de la sorpresiva renuncia.
“Hemos despertado con una serie de preguntas, con incertidumbre, no sabemos quién se hará cargo del país, porque luego de la renuncia de los mandatarios anteriores debería reunirse la asamblea legislativa, aceptarla y elegir a un nuevo presidente interino. Sin embargo la persecución que el propio movimiento está haciendo en contra del Movimiento al Socialismo, sus diputados y senadores, ha llevado a muchos de ellos a renunciar. Y el líder de esta movilización, Luis Fernando Camacho, ha pedido que renuncien los que aún faltan, es decir, que todos los parlamentarios del movimiento del socialismo se vayan, lo cual quitaría a la asamblea del quorum legal, porque el movimiento del socialismo tenía dos tercios del parlamento, entonces si no hay parlamento, la sucesión constitucional que debería corresponder a Jeanine Añez, tercera vicepresidenta del senado y opositora, no se pueden concretar“, explicó Molina.
Ante el difícil momento que vive por estas horas el pueblo boliviano, Molina contó que en la noche del domingo “han habido saqueos y actos vandálicos en La Paz atribuidos a militantes del MAS (Movimiento Al Socialismo)”, y que estos se han agravado por la falta de policía en la ciudad de La Paz.
“No sabemos muy bien porqué la policía no ha retomado sus funciones luego del amotinamiento, probablemente es porque los comandantes no pueden lograr todavía controlar la situación interna de rebelión de la tropa, y también que la policía quiere negociar con un nuevo gobierno las reivindicaciones que la llevaron a ese amotinamiento”, comentó el periodista.
Es por esto que en las ultimas horas, han salido de Bolivia noticias sobre saqueos e incendios a casa de funcionarios llevados a cabo por diferentes sectores. Sobre esto, Molina contó que “los saqueos no son a las casas de los funcionarios, es al contrario. Por eso se les atribuyen al MAS, porque se han quemado la casa de Waldo Albarracín, rector de la Universidad de la Paz que es uno de los líderes de la protesta, también la casa de una periodista, se ha atacado una central de buses de la municipalidad, una fábrica de chocolates y hay una ramificación delincuencial que han atacado y saqueado farmacias tiendas y demás”.
“Los vecinos han tenido que organizarse, con palos y otros elementos defenderse y patrullar, especialmente en los barrios más alejados. Además, las redes han explotado con una serie de rumores, muchos de ellos falsos, acerca de ataques de aquí y allá, en fin ha sido una noche muy difícil, porque la policía no está por motivos que desconocemos“, resaltó.
Sobre la necesidad de que la policía retome sus funciones, Molina comentó que “es una demanda de la población, porque hay un vacío de poder y sin policía, además, al mismo tiempo el ejercito ha decido no salir, entonces estamos un poco desprotegidos en este momento. Pero por suerte la sociedad boliviana es está acostumbrada a tener un Estado débil, entonces normalmente suple esta debilidad con su propia organización, y esto es lo que ocurrió anoche, y seguramente va a ocurrir en las próximas horas hasta que la policía retome su trabajo“.
¿Golpe de Estado o Revolución?
En Bolivia se ha consumado un golpe de Estado producto del accionar conjunto de civiles violentos, el personal policial autoacuartelado y la pasividad del ejército. Es un golpe perpetrado contra el presidente @evoespueblo, que había convocado a un nuevo proceso electoral.
— Alberto Fernández (@alferdez) November 10, 2019
Tras la renuncia de Evo Morales, muchas fueron las voces que se alzaron para dar su punto de vista. Desde Argentina se ha dado una mirada dividida acerca de lo que ocurrió en Bolivia, y si bien un gran sector habla de golpe de estado, para Molina esto no es así.
“Yo lo califico como una revolución o si quieres una contra revolución, depende la posición política que adoptes, pero no ha sido una acción de fuerzas armadas, excepto por la pasiva, es decir, la policía se amotina, le da el jaque mate a Evo Morales, y luego los militares deciden no defenderlo y le siguieren renunciar“, expresó.
“Pero lo que realmente a destronado a Morales ha sido una movilización popular extensa e intensa de 18 días en todo el país, que ha paralizado a las ciudades y que ha acorralado al Gobierno después de las elecciones del pasado 20 de octubre. La denuncia de fraude que hizo la oposición obligaron a Morales a ir retrocediendo hasta que finalmente ofreció una nueva elección, ya no reclamar su victoria en una primera vuelta sino una nueva elección, pero ya era tarde, porque en ese momento la población quería su renuncia”.
“Ahora otra cosa es que los dirigentes de esta revuelta popular están radicalizándose en su propia victoria y ahora están dificultando una salida constitucional, porque si Camacho pide que los parlamentarios del oficialismo anterior renuncien, entonces no tenemos asamblea y si no tenemos asamblea, ¿cual es el mecanismo para elegir a un presidente?, y si no hay un mecanismo legal, él propone una junta cívico militar, que ya tendría una connotación de otro tipo, se trataría de una cuestión de facto fuera de nuestra ley”.
El futuro Evo Morales
Para el periodista boliviano “Morales está vencido” y ahora está con serios problemas de seguridad porque ha denunciado que lo han intentado detener, aunque luego el comandante de la policía desmintió esto.
“Aquí los ánimos están muy caldeados, no se que pasaría si los grupos de manifestantes se encuentran con Morales en algún camino, en algún sitio. Él está escondido en el Chapare, en la zona cocalera, entonces yo creo que Morales está derrotado y que lo que está buscando ahora es encontrar seguridad personal. En todo caso, que ocurrirá con su movimiento y con él en el futuro dependerá de estas horas y de lo que ellos también hagan“, indicó Molina.
Denuncio ante el mundo y pueblo boliviano que un oficial de la policía anunció públicamente que tiene instrucción de ejecutar una orden de aprehensión ilegal en contra de mi persona; asimismo, grupos violentos asaltaron mi domicilio. Los golpistas destruyen el Estado de Derecho.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) November 11, 2019
Además, en las últimas horas se conoció que el presidente electo, Alberto Fernandez, solicitó a Mauricio Macri que el país le de asilo a los funcionarios bolivianos.
“No sabemos nada sobre eso, lo que si sabemos es que Argentina, por lo pronto, está descartada por la gente del MAS que quiere asilarse, porque justamente Fernández todavía no ha asumido la presidencia. Muchos están entonces en la embajada de México, que ha ofrecido un asilo irrestricto, el problema para Morales es que para llegar a México tiene que pasar por países vecinos, y eso complica su situación. Pero todo esto es extraoficial, porque no hay confirmación por parte de Morales de que quiera irse”, concluyó Molina.