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En lo que fue un domingo “bendecido” y a pleno sol, miles de personas -jóvenes y adultos-, caminando, en bicicleta o en distintos medios de transporte llegaron en la mañana de ayer hasta el Santuario Diocesano de Nuestra Señora de Loreto, en lo que fue su XVIII edición.
Bajo el lema de “María de Loreto, Refugio del Peregrino”, los fieles peregrinaron este año desde distintos puntos de Misiones, Corrientes e inclusive del Paraguay para ingresar al centro de espiritualidad con mucha emoción, fe, alegría, cánticos, rezos y carteles.
La misa principal fue presidida por monseñor Juan Rubén Martínez, obispo de la Diócesis de Posadas y contó con la presencia del gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua.
Además en honor a los “Santos Mártires”, se dio lectura a la designación del año Mariano Misionero, período que va desde noviembre de 2019 hasta el mismo mes de 2020.
Durante la ceremonia, el prelado manifestó: “Atravesamos tiempos de odio y violencia. Ante ello, nuestra respuesta debe ser la de evangelizar con el lenguaje del amor. Tenemos que ahondar en nuestro compromiso con Jesucristo, tenerlo en nuestros corazones. Hoy falta el diálogo, no debemos subirnos al ring porque lo que necesitamos es multiplicarnos en amor hacia los más necesitados. Aumentar la misericordia”.
Camino a Loreto
Vale recordar que esta peregrinación arrancó el sábado por la tarde desde tres puntos distintos, pero en forma simultánea de la tierra colorada: Posadas, Jardín América y Leandro N. Alem.
Según fuentes de la Policía de Misiones, ayer al santuario arribaron más de siete mil personas.
En primera persona
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“Nosotros salimos desde Posadas, de la Parroquia Jesús Misericordioso. Es la primera vez que participo de una peregrinación de tal magnitud”, relató ayer Julio Emanuel Ríos Nicoliquia, un joven de 21 años que se movilizó, desde Candelaria, con un improvisado bastón debido a un esguince que sufrió hace dos semanas. “Se me complicó en el primer trayecto y me vendaron. Pero la fe nos moviliza, yo vine a agradecer a la Virgen por todas las cosas que me pasaron este año. Mi familia está bien y quiero agradecerle, venir caminando era un deseo de mi abuelo que no pudo hacer y yo se lo cumplí”.
Por su parte, Celeste Ariste, una joven de 24 años y oriunda de Posadas contó que es la quinta vez que camina los 58 kilómetros que separan a la capital provincial de Loreto y dijo que “nuevamente vine para agradecerle a la Virgen de Loreto, a Dios y pedir por mi familia , por las personas que están a mi alrededor”.
No sólo la gente de a pie dialogó con PRIMERA EDICIÓN, ya que un numeroso grupo de ciclistas que partió desde Posadas al Santuario de Loreto en la madrugada de ayer comentó en nombre de Marcelo Prochaska que “se sumaron muchos ciclistas, no sólo de Posadas sino de toda la provincia y otros puntos del país para venir a rezar, pedir y agradecer a la Virgen de Loreto. Esto una fiesta familiar”.
A lo que añadió: “Es la primera vez que traemos la imagen de Loreto acompañando desde nuestra salida a los ciclistas. Ahora va a ser la imagen que nos va a acompañar”.
Parte del paisaje e invitación
Por otra parte, y como cada año los puestos de comidas y de los más variados artículos se ubicaron al costado del camino principal y acompañaron al paisaje religioso.
José Ferreyra, de San Ignacio y encargado de uno de los puestos de comida contó que “trajimos empanadas pero la cantina es amplia y también tenemos pollo, asado, choripanes y todo lo que se pueda servir en un lugar como este. Es una de las formas que tenemos para demostrar y expresar lo que sentimos y como le agradecemos a la Virgen”.
En tanto, la local Matilde Portel manifestó a este Diario que “somos de Loreto y queremos invitar a toda la gente de Misiones, Argentina y Paraguay, a que se sumen a la caminata por la Virgen de Loreto que se realiza cada tercer domingo de noviembre. Para nosotros es una enorme muestra de fe, pasión y orgullo”.