En el marco de la huelga y múltiples protestas que se llevan a cabo en Colombia, en la capital, Bogotá, la Policía ha dispersado a grupos de manifestantes con gases lacrimógenos en la plaza Bolívar, centro de la ciudad, informó el diario local El Tiempo.
En tanto, las autoridades han decretado este jueves el toque de queda en la ciudad de Cali, mientras en Medellín se han reportado disturbios y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Según la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, unas 207.000 personas participaron de las protestas de manera “pacífica” en términos generales. En tanto, al menos 22 personas han sido retenidas por “afectar la tranquilidad”, indicó el director de la Policía Nacional, general Óscar Atehortúa.
El paro nacional de este jueves ha sido convocado por sindicatos, jubilados, trabajadores estatales y estudiantes, en oposición a un presunto proyecto del Gobierno de reforma laboral y modificación del sistema de pensiones.
Si bien las manifestaciones se desarrollaban pacíficamente desde temprano, en horas de la tarde una serie de desmanes en inmediaciones a la plaza Bolívar, motivaron el accionar del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), que reprimió con gases lacrimógenos.
La jornada incluyó bloqueos y destrozos en las estaciones del sistema de transporte público Transmilenio. También hubo enfrentamientos en inmediaciones del Congreso nacional, donde una decena de encapuchados lanzó piedras contra la sede parlamentaria.
En redes sociales se difundió un hecho de abuso policial en medio de la tensión. Mientras efectivos intentaban detener a un joven, una mujer que intentaba protegerlo recibió una patada en el rostro de parte de un uniformado.
En otras ciudades del país también se registraron disturbios. En Cali, donde marcharon alrededor de 20.000 personas según las autoridades, el alcalde, Maurice Armitage, decretó toque de queda a partir de las 7:00 p.m. de este jueves [01:00 del viernes, GMT]”. Y aclaró en su cuenta de Twitter Amitage: “Quienes estén afuera a esa hora, podrán ser detenidos por las autoridades”, agregó el alcalde.
Por su parte, el secretario de Seguridad del municipio, Andrés Villamizar, informó que alrededor de 150 personas se dedicaron a hacer desmanes y tratar de “generar caos en la ciudad”.
Sin embargo, en la mayoría de los 40 puntos del país donde se realizaron movilizaciones, no se registraron hechos violentos. En algunos casos, fueron los propios manifestantes los que rechazaron la presencia de encapuchados.
Fuente: RT en español.