Misiones enamora con sus paisajes, sus colores, su fauna y la calidez de su gente, y justamente la amabilidad y buena atención de sus pobladores las que lograron que Daniel Bautista Lara y su hermana Abigail llegaran de México para quedarse.
Hace casi un año, junto a un grupo de amigos, iniciaron un viaje de turismo a Argentina, primero llegaron a Buenos Aires y luego arribaron a Posadas. Una vez instalados decidieron quedarse a emprender para poder sostener su economía. “Cuando llegamos, lo primero que nos enamoró fue la amabilidad de la gente. Eso no pasa en todos lados y acá nos tendieron la mano como si nos conocieran. La gente nos apoyó, nos invitaban a comer a sus casas y por eso decidimos quedarnos”, expuso Daniel.
Viven junto a una familia colombiana que reside en Posadas, quienes los albergaron desde los inicios de su estadía. Y un día decidieron elaborar comida mexicana y comercializarla en la ciudad. “Empezamos vendiendo en las calles. Un día vine al Mercado Concentrador (MCZ), estaba vendiendo en la vereda y ahí me tendieron una mano. Nos reconocieron el trabajo por ser jóvenes emprendedores”, señaló Daniel.
De esta forma llegaron al MCZ, dependiente del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial (IFAI) y se instalaron en el sector Preelaborados con productos de origen mexicano. De esta manera, agregan valor a lo que ya se ofrece y amplían la oferta gastronómica del centro comercial de la avenida Aguado 4450 de Posadas. “Cuando llegan a nuestro box primero se encuentran con una sonrisa y un ‘buenos días’. Después le ofrecemos empanadas a base de maíz, muy características de México y lo que más viene a buscar la gente. También tenemos tamales y productos colombianos como buñuelos, arepas, panzerottis y los sábados vamos a hacer tacos. Con el tiempo queremos seguir incrementando la oferta”, indicó.
Los precios son accesibles, parten desde los $20. Daniel comentó que la gente se mostró asombrada por la diversidad de los platos y que ya pudieron hacer clientes que buscan los productos semana a semana. “De empezar de cero, ahorita ya pueden ver los frutos que tenemos. Si ustedes no van a México, México viene a ustedes”, remarcó Daniel con el característico acento y un gesto de agradecimiento por la posibilidad de tener su propio emprendimiento en la tierra colorada.