La mayoría de las personas de Concordia que recibieron la ayuda económica que proporciona la Tarjeta Alimentaria, se volcaron mayoritariamente a la compra de “productos lácteos”, algo que fue muy bien recibido por la cartera que conduce Daniel Arroyo.
“El bajo consumo de leche” fue planteado por el ministro como uno de los principales problemas en la alimentación de los niños, ya que en general es reemplazado por “el alto consumo de fideos, harina y arroz”, lo que genera “serios problemas de talla y obesidad”, destacó en su cuenta de Twitter.
Para que la misma tendencia se mantenga una vez que haya implementación plena del programa, desde la cartera de Arroyo se sugirió a las provincias avanzar en acuerdos de precios con los comercios para ganarle a la inflación.
“El ministro Arroyo nos sugirió que la Provincia realice convenios con los comercios locales para mantener el precio de los productos de la canasta básica alimentaria para que la inflación no haga mella en el dinero que disponen para comer y que las familias puedan seguir comprando a un valor razonable”, puntualizó la ministra de Desarrollo Social de la provincia, Benilda Dammer.
“Conscientes de que para la utilización de estas tarjetas es necesario que los comercios tengan posnet y que muchos puestos en ferias no tienen esta herramienta, se está pensando lanzar a partir de febrero una app para los que no tienen posnet, como para que también puedan verse alcanzados por el mayor consumo que generará la utilización de estos plásticos para alimentos”, indicó la mujer.
Las tarjetas alimentarias, que permitirán comprar alimentos, tendrán un monto de entre 4 mil a 6 mil pesos. La medida, no suplanta ni es excluyente de otros beneficios adquiridos como la Asignación Universal por Hijo. No es necesario inscribirse en ningún lugar ni hacer trámite extra.