En medio de amplia incidencia de desnutrición infantil, el Programa Provincial de Recuperación Nutricional “Hambre Cero” buscó generar acciones para cubrir necesidades alimentarias en los sectores más vulnerables. Ayer se presentó la continuidad de este plan que ahora busca ampliar su cobertura para llevar no solamente los paquetes de leche fortificada para los niños, sino también sumar a adolescentes y adultos mayores. Además, buscarán la incorporación de otros alimentos a los paquetes sociales entre los cuales se consideran el acceso a carnes y verduras.
En el Salón Oval del Ministerio de Educación en Posadas detallaron cómo seguirá este beneficio en la provincia en sus 76 municipios. Luego de un relevamiento de la situación de los niños, niñas y adolescentes en Misiones, con la participación de los ministerios, entes centralizados y los equipos sociales, son 5.985 los sujetos de derechos incorporados actualmente al programa. Mensualmente se otorgarán dos kilos de leche en polvo fortificada, además de tickets por un monto de 400 pesos para compras en ferias francas. Por otra parte, asegurarán la entrega de la Tarjeta Social Alimentaria por un monto de 650 pesos.
“Presentamos una continuidad del programa fortaleciendo el trabajo que se venía realizando con Hambre Cero. Venimos ahora con otra impronta e ideas, donde trataremos de sacar a los niños de esta problemática nutricional”, contó el subsecretario de Derechos Económicos Sociales y coordinador del Programa Provincial de Recuperación Nutricional Hambre Cero, Facundo Galeano.
En materia de cambios, previamente este programa provincial centraba su atención en primera infancia y la cobertura nutricional en los niños de hasta 5 años. Sin embargo, buscarán ampliarlo para que cubra “desde los 0 a 18 años, también adultos mayores y obviamente personas con discapacidad. Queremos un trabajo más amplio en conjunto con Salud Pública donde una prioridad serán los niños”, remarcó el funcionario.
Asimismo, Galeano indicó que más allá de asegurar la llegada de los paquetes de leche fortificada, “queremos implementar también carnes además de frutas y verduras, para lo cual buscaremos una labor en conjunto con las ferias francas en la provincia”. Aunque por el momento el presupuesto es enteramente con fondos de la provincia, para asegurar esta ampliación de la cobertura del programa “buscaremos obtener un aporte de subsidios desde la Nación”, añadió.
En 2017, el programa provincial contaba con alrededor de 11 mil beneficiados, de los cuales más de 800 pertenecían a casos de desnutrición crónica. Al respecto de estos casos, el subsecretario explicó que “durante el primer trimestre tendremos datos reales de los chicos recuperados y de los que próximamente van a ser incorporados en ese sector, así que el primer punto será una articulación con todos los entes para tener los datos precisos. Para ello, necesitamos un contacto con Salud Pública para lograr incorporar a estos niños con problemática nutricional y también reemplazar a los que pudieron salir de este estado”.
En cuanto al panorama que se han encontrado para continuar con la asistencia a los sectores vulnerables en Misiones, Facundo Galeano reflexionó que “venimos de cuatro años de una quita derechos. Ahora lo que intentaremos es de sacar a los niños de las necesidades alimentarias. Para ello nos tocan grandes desafíos en los años siguientes pero por suerte tenemos el apoyo del Gobierno nacional que está muy al tanto de la situación que estamos pasando en la provincia”.
En los municipios
Durante la presentación del renovado “Hambre Cero” estuvieron presentes autoridades municipales y referentes sociales de atención a los sectores vulnerables para actualizar los padrones de los beneficiarios del programa.
Entre ellos, el intendente de Antonio Ruiz de Montoya,Víctor Vogel, quien explicó que “estos fondos que llegarán ahora serán buenos y muy bien invertidos. En el municipio tenemos un grave problema con muchos chicos que asisten a la escuela con jornada extendida porque aprovechan para comer ahí. Ahora en vacaciones estos niños están en su casa donde la mayoría son niños humildes. En estos días tuvimos que conformar un comedor comunitario para darle una solución rápida al problema”.
Llegada desde San Antonio, Paola Villalba comentó a PRIMERA EDICIÓN que “como parte de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia hace muy poco iniciamos el trabajo en el municipio, donde a pesar de ser pequeño tenemos una amplia demanda en cuanto a chicos carenciados donde tratamos de solventarla de alguna forma. El grupo de población serán alrededor de 50. Sobre todo nos centramos en los niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad. Por más de ser una zona donde se cultiva en las chacras, es indispensable conseguir la leche y mercadería para acercar a los niños”.