Este martes se celebra el Día Internacional de Internet Segura en 150 países en todo el mundo, un evento que desde 1997 busca promover un uso seguro y positivo de las tecnologías digitales, especialmente entre niños y jóvenes.
En este contexto, cabe preguntarse qué tan preparados estamos -niños, jóvenes y adultos-para navegar de forma segura en Internet.
De acuerdo a estudios de Google y Unicef, más del 65% de los adultos considera que tiene conocimientos sobre seguridad en Internet suficientes para hablar con confianza con los adolescentes, y 6 de cada 10 familiares afirmó intervenir lo suficiente para mantenerlos seguros en línea. Los menores coinciden con sus padres y madres. Sin embargo, los docentes señalan que las familias necesitan más información y deberían intervenir más.
En sentido opuesto, los adolescentes expresaron que sus maestros no están haciendo lo suficiente para mantenerlos seguros en Internet.
La mitad de ellos manifestaron haber experimentado alguna situación negativa en Internet y casi el 20% se sintió expuesto a material inadecuado.
Pero no es el único riesgo al que se enfrentan. Como señala el Comité sobre los Derechos del Niño, el entorno digital puede incluir información sesgada, con estereotipos de género, discriminatoria, racista, violenta, pornográfica, de explotación y que usa un discurso de odio, así como narrativas falsas, información errónea y desinformación.
Los chicos, por ejemplo,:
- Pueden encontrar consejos sobre falsos remedios de salud mientras se documentan para un trabajo de ciencias.
- Pueden verse involucrados en foros que fomentan discursos de odio y narrativas falsas sobre una religión o grupo étnico, cuando se interesan por una noticia que han visto en la tele.
- Su curiosidad puede llevarles a contenidos que les animen a participar en actividades ilegales o dañinas, incluso mensajes promovidos por parte de sectas, bandas criminales o grupos terroristas armados.
- Buscando dibujos animados o juegos, pueden encontrarse con contenidos para adultos, como pornografía o juego on-line.
derechos de la infancia.
Qué pueden hacer las familias
Las familias y cuidadores son clave para que cada niño o niña aprenda desde la primera infancia a utilizar las tecnologías digitales de forma responsable, respetuosa, crítica y creativa:
- Estableciendo un diálogo abierto y constructivo sobre cualquier problema que puedan encontrar on-line.
- Haciendo y respondiendo preguntas como forma de facilitar la información y la comprensión.
- Educando sobre las formas de aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece el entorno digital, evitando al mismo tiempo los riesgos potenciales que inevitablemente existen.
- Enfocando la cuestión no sólo como algo teórico, sino siendo capaces de introducir cambios en los hábitos y rutinas diarias de toda la familia.
- Siendo conscientes del poder del ejemplo y de su papel como modelos de conducta: los padres, madres y cuidadores también influyen en los hábitos on-line de los más pequeños al dar un ejemplo de uso positivo de las herramientas y dispositivos digitales.
- Participando en actividades formativas sobre protección en Internet cuando detectamos que nos faltan los conocimientos necesarios para abordar el problema.
Qué se puede hacer desde la escuela
Desde el ámbito educativo es posible contribuir a un mejor uso de las tecnologías de la información, la comunicación y la relación (TRIC) por parte de los estudiantes, como parte de una enfoque general de educación en derechos de infancia:
1. Dotando al alumnado, desde la etapa de educación infantil, de las habilidades digitales básicas que necesitan para enfrentarse al mundo on-line.
Estas habilidades están relacionadas con la alfabetización digital y mediática: la protección on-line, la ciberseguridad y la ciudadanía digital. Pero también es clave potenciar competencias no digitales, como las relacionadas con la participación y el pensamiento crítico.
Estas competencias se pueden adquirir en el aula, capacitando a los alumnos para que creen su propio contenido y puedan tomar decisiones adecuadas sobre su libertad de expresión on-line.
2. Trabajando con las familias, a través de actividades informativas, de formación y de orientación, para compartir dudas y estrategias educativas y para ayudar a cubrir las carencias de conocimientos que puedan darse.
Fuente: Unicef