Desde el 10 de marzo, un contingente de 32 turistas, permanecía en cuarentena en el Hotel Cabañas del Parque, ubicado en la localidad de Oberá. Este lunes por la mañana fueron liberados tras cumplir el protocolo, de acuerdo al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), vigente en toda la Argentina y pasado el mediodía partieron al aeropuerto de Foz de Iguazú.
Entre el grupo de turistas, que se subieron a un colectivo de larga distancia desde Buenos Aires, se encontraban 18 personas oriundas de República Checa, un coordinador de viajes y otros 13 de diferentes localidades del país.
PRIMERA EDICIÓN habló con Nicolás Ostrorog, propietario del establecimiento, quien explicó que “ellos fueron controlados, se cumplió con todo el protocolo y por eso se dio la liberación de los pasajeros hoy por la mañana”.
Seguidamente agregó que “no hubo ningún síntoma en ninguno de los pasajeros, huéspedes ni de los que venía en el colectivo con el grupo de extranjeros. Al momento que se le hizo el control dejó de ser un grupo de riesgo y lo único que se hizo fue continuar con los protocolos de contención”.
Sin dudas, el foco estuvo puesto en los turistas europeos que se encontraban en la tierra colorada. Luego de pasar seis días en cuarentena, este lunes se resolvió la situación y el contingente partió, en un largo viaje, rumbo a sus hogares.
“En este momento los checos ya están yendo con el mismo colectivo que vinieron desde Buenos Aires a Foz de Iguazú, de allí a Florianópolis y de ahí tomarán el vuelo de repatriación”, explicó el responsable hotelero.
Además, Ostrorog destacó el trabajo de las autoridades de salud y turismo provinciales, quienes realizaron “un impecable trabajo”.
“Nos cancelaron todas las reservas”
Por otro lado, durante los últimos días se habló mucho sobre este grupo que permaneció en cuarentena. La desinformación, los comentarios livianos desconociendo el tema y sobre todo la “locura” con el coronavirus, afectaron directamente al hotel obereño.
“Se dijo y se habló miles de cosas, la imagen del hotel está destruida porque la gente no entiende. No leyó el DNU ni las indicaciones de la OMS, que son básicas y bien entendibles. La gente piensa que es una nube amarilla que viene contagiando y matando gente, nada más alejado que eso”, comentó Ostrorog.
En esa misma línea expresó que “ahora estamos reconstruyendo la imagen del hotel porque nos cancelaron todas las reservas. La gente habló cualquier tipo de barbaridad, fue lamentable la cantidad de comentarios”.