Más allá de los inconvenientes para enfrentar sus compromisos, hoy la principal preocupación de los comercios e industrias de todo el país pasa por el corte de la cadena de pagos que se va a producir indefectiblemente, a raíz del decreto presidencial de aislamiento social, preventivo y obligatorio en el marco de la emergencia sanitaria y epidemiológica.
La medida ha generado un freno en todo el sistema financiero, comercial, bancario y productivo. Retomar esto va a llevar meses y no podrán salir sin ayuda de los Gobiernos y las entidades financieras.
En este sentido, el presidente de la Cámara de Comercio de Posadas, Sergio Bresiski, explicó a PRIMERA EDICIÓN que “es nuestra principal preocupación, tanto de nosotros hacia con quienes tenemos compromisos como de aquellos que tienen compromisos con nosotros”.
“La cadena de pagos se va a romper, de eso no hay duda, el sistema no aguanta 14 días de freno. Por eso estamos trabajando para ver la manera en que salimos cuando todo esto termine. Estamos elaborando un pedido formal a los bancos y ver también la manera en que el Estado nacional nos puede ayudar”, remarcó el empresario dedicado a la venta de materiales de construcción.
Dijo que la idea es “que el banco permita diferir cuál cheque se va a cubrir y cuál no. Es algo que se tiene que resolver a nivel nacional, mediante un decreto o una resolución”.
Graficó la siguiente situación: “Yo le giro cheques a dos personas, con uno me llevo bien y con el otro no. Entonces necesito la posibilidad de poder arreglar con aquel que me llevo bien para pagarle más adelante y, a la vez, necesito cumplir con el otro. Eso es lo que el banco me tiene que autorizar, que yo pueda diferir a quién cumplir y quién no”.
Otra situación que podría ocurrir es que “el sistema bancario va a salir a cubrir los cheques a todo el mundo pero con tasas seguramente muy altas. Primero vamos a celebrar pero cuando veamos las tasas vamos a tener otro gran problema, y el sistema bancario otra vez va a salir airoso de esta crisis”.
Aislamiento parcial
Ante la posibilidad de que se pueda prolongar la cuarentena, Bresiski opinó que “también estamos elaborando una propuesta sobre esto. En este sentido creo que lo que deberíamos demandar los misioneros es que podamos trabajar, ya que nos tomamos la cuarentena en serio e hicimos las cosas bien”.
“Si otras provincias tienen muchos casos que sigan aislados, pero si nosotros hicimos las cosas como corresponde, deberíamos solicitar que nos permitan levantar la cuarentena, volver a trabajar pero manteniendo las fronteras cerradas para que no entre nadie”, consideró.
“Necesitamos pedir eso, levantar las persianas de los negocios porque si no hay muchos que se van a fundir. Acá no hay ninguna posibilidad de salvataje, no vemos un Plan Marshall como hubo después de la segunda guerra mundial”, remarcó.
Productos con vencimiento
El titular de la Cámara planteó otro problema que se está generando: mucha gente trabaja con productos que tienen vencimiento. “Yo trabajo con cemento, por ejemplo, que no puede pasar los 45 días embolsado porque se queda duro, tiene que tener circulación o se arruina”, apuntó. “Ni hablar de la leche o de otros productos que se funden más rápido. Hay muchos rubros que no tienen circulación de sus productos y van a tener que rematar o tirar todo cuando se levante la cuarentena”, dijo. “¿Eso cómo recuperan?”, se preguntó.
Bola de nieve
Bresiski reconoció que “en medio de la emergencia no es momento de plantear todas estas problemáticas” pero aseguró que “cuando se termine la cuarentena queremos que sepan que vamos a demandar respuestas a estos temas”.
“Estamos de acuerdo en que la salud era la prioridad, pero para cuando esto pase vemos que se viene una bola de nieve inmensa peor que en 2001. En aquel año por lo menos había circulación, pero ahora está todo parado”, indicó.
“Hay que recordar que venimos de dos años de recesión, venimos del freno de las vacaciones de verano y ahora nos agarra esto”, añadió.
“Para colmo, si todo va bien, cuando nosotros salgamos de esta pandemia estamos viendo que Paraguay y Brasil van a estar muy complicados. Ahí vamos a tener otra pérdida porque son un mercado que consume nuestros productos pero no los vamos a tener”, finalizó.
Situación nacional
Los empresarios ahora esperan con preocupación al 1º de abril. Ese día deben comenzar a liquidar salarios y enfrentar el pago de impuestos, cuotas de préstamos, servicios, alquileres e insumos, todos compromisos para los cuales no han podido “hacer caja” como lo hacen habitualmente.
Al respecto, Pedro Cascales, secretario de la Cámara Argentina de la Máquina Herramienta (CARMAHE), manifestó que tras la medida que comenzó a regir desde la hora cero del viernes pasado “está todo freezado”.
A la vez, advirtió sobre un posible efecto “avalancha de vencimientos” que no podrán enfrentar las empresas cuando se disponga el final del aislamiento.
En tanto, Tomás Canosa, director de Estudios Económicos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA), coincidió en los problemas que está provocando la cuarentena, y en la necesidad de correr todos los vencimientos de las empresas. Canosa sostuvo que una propuesta del sector podría ser “el diferimiento de pagos impositivos e intereses bancarios”.