Uno de los cuatro detenidos por el crimen del colono Rodolfo “Rudy” Weber (61) confesó ayer ante el juez Martín Brites haber estado presente en el hecho, junto a los otros tres sospechosos, aunque se desligó al afirmar que él no fue quien mató a tiros a la víctima, indicó una fuente.
En ese sentido los voceros contaron que el imputado, durante una extensa indagatoria, habría señalado con nombre y apellido a uno de sus presuntos cómplices como el responsable de haber “apretado el gatillo” contra el agricultor porque “tenían una disputa de vieja data”.
Tras brindar su versión de lo sucedido fue el turno de los otros acusados, quienes se abstuvieron de declarar ante el magistrado.
No obstante todos recibieron la misma imputación provisoria: “homicidio criminis causa”, por lo que quedarán detenidos hasta que se resuelva su situación procesal.
“Rudy” Weber fue asesinado de tres disparos en la cabeza, el pasado lunes 23 de marzo en una de sus chacras de Santiago de Liniers, localidad ubicada a unos 30 kilómetros de Eldorado.
Un hijo del agricultor fue quien reportó el hallazgo del cuerpo, minutos antes de las 20 de ese día. Los restos de un ternero con evidentes signos de haber sido faenado abonaron la hipótesis, desde el principio de la investigación, de que todo apuntaba a criminales dedicados al cuatrerismo.
Incluso se manejó como móvil del hecho de que Weber reconoció a uno o más de los que estaban matando a sus animales y fue allí que decidieron asesinarlo. Quitarle la vida para que no los delate, es decir tapar un delito con un homicidio, lo que en el Código Penal está tipificado como “criminis causa”.
Apenas 72 horas después del hecho fueron detenidos los cuatro sospechosos. No estaban muy lejos, eran peones en una propiedad vecina.
“Me tenía podrido”
Fuentes de la investigación precisaron que en su relato, el imputado que habría confesado haber estado presente en el hecho habría dicho que “esa noche fueron a faenar vacas ajenas en el campo de Weber”, y que en esas circunstancias uno de ellos -eran cuatro en total de acuerdo a la investigación- se alejó unos metros cuando vio llegar al propietario de los animales.
Luego el acusado habría asegurado que “escuchó detonaciones similares a balazos” y que cuando el presunto cómplice regresó le habría dicho al grupo que mató al colono porque “lo tenía podrido”, agregó una fuente.
“Aprovechó que el hombre con el que tenía una disputa de vieja data llegó al lugar y entonces lo mató”, habría revelado el imputado ante el juez de Instrucción 3 de Puerto Iguazú, Martín Brites, quien subroga en la causa al Instrucción 1 de Eldorado.
No tuvo tiempo a nada
La ausencia de lesiones defensivas confirmó que “Rudy” no tuvo tiempo de defenderse de su asesino, quien lo mató a sangre fría y con disparos a corta distancia. Fue en el campo que el hombre tenía a la altura del kilómetro 31 de la ruta provincial 17, en el municipio de Santiago de Liniers.
Vecinos
Tal como publicó PRIMERA EDICIÓN, en base a datos y pistas, los efectivos allanaron una chacra que posee forestaciones con forrajeros de sistema silvopastoril para vacunos situada al lado de la chacra donde se cometió el homicidio. En un domicilio donde residían varios peones y cuidadores del lugar fueron apresados los sospechosos.
En dicho lugar los uniformados incautaron dos celulares, vainas servidas de escopeta calibre 16, una vaina calibre 22, estuche vacío para cartuchos del mismo calibre, dos machetes filosos y otras armas blancas afiladas tipo cuchillos. Mientras que tras un intensivo y minucioso rastrillaje de todo el lote cubierto de forestación de pino, oculto debajo de un tronco y tapado con ramas se halló un rifle calibre 22 con cargador con 14 cartuchos intactos.
Los ahora imputados son dos hermanos de 16 y 18 años (ambos de la zona), un joven de 28, de nacionalidad paraguaya y un cuarto joven de 26. Se aguardan pericias claves como las pruebas de parafina a los involucrados para establecer si manipularon armas de fuego.