Productores y tareferos iniciaron la zafra yerbatera en Misiones en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto a nivel nacional, que se extendió hasta el próximo 12 de abril inclusive.
Es que si bien en un primer momento decidieron suspender las actividades, la mayoría de los secaderos de yerba mate volvieron a trabajar y por ende se retomaron las tareas de cosecha y acopio.
Se recuerda que la producción yerbatera fue exceptuada del cumplimiento de la cuarentena y de la prohibición de circular.
En consecuencia, y ante la necesidad de ganar algo de dinero, los colonos ayer volvieron al trabajo en los yerbales, pero con una serie de medidas sanitarias de prevención que fueron dispuestas por el Instituto Nacional de la Yerba Mate para el desarrollo de las distintas tareas.
“La cosecha comenzó de forma habitual, se está empezando a cortar. Hoy (por ayer) fue el primer día tras el inicio de la cuarentena y la mayoría de los secaderos empezó a acopiar. Se acató la suspensión durante la primera quincena del aislamiento obligatorio, pero eso ya se terminó para esta segunda parte”, manifestó a PRIMERA EDICIÓN, Martín Dellien, presidente de la Asociación Casa de la Familia Yerbatera de San Pedro.
Destacó, a su vez, el apoyo del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) que estableció unas normas de procedimiento para la cosecha, acopio y secanza de hoja verde.
En este contexto, Dellien apuntó que el problema con las medidas de seguridad se da “más que nada dentro del yerbal”.
“Allí las tareas son de forma grupal. Pero, hay que entender que estamos frente a una necesidad importante del tarefero por darle de comer a su familia. La cuarentena sin plata no es fácil”, observó.
Asimismo, señaló que “muchos colonos están desesperados”. “Somos pequeños y medianos productores, no solemos contratar mucha mano de obra, hoy estamos en una crisis importante y la gente quiere trabajar. En estos momentos se conforman con salir a trabajar y ganar algo para la familia”, adujo.
“No se los puede frenar”
A todo esto, el propietario de secadero en Apóstoles, Héctor Olexyn, comentó a este Diario que desde este lunes comenzaron con las actividades “con bastante hoja verde”.
“Los colonos necesitan cosechar y por suerte las empresas están cumpliendo con los pagos. Hoy (por ayer) comenzamos con la cuadrilla luego de hacer todos los trámites para poder cruzar a Colonia Liebig (Corrientes). Por suerte la actividad es normal y se están tomando todos los recaudos”, remarcó.
Expresó, además, que “se trasladó a todo el personal respetando las distancias mínimas y con barbijos”. “Se desinfectó la unidad con agua y lavandina diluida al 5%. Además se puso a disposición alcohol al 70%”, precisó.
Por su parte, el representante de la Asociación de Productores Agropecuarios de Misiones (APAM), Cristian Klingbeil, dijo que “desde el lunes los secaderos comenzaron a trabajar en la Zona Centro con el acopio de yerba mate”.
“No se vio mucho movimiento de camiones, pero esto es inevitable. Los tareferos están desesperados y esperan todo el año por esta época para comenzar a cosechar la yerba, no se los puede frenar”, consideró.
Y opinó que “cuando no tenés algo para poner dentro de la olla, la desesperación te lleva a trabajar sí o sí”. “Los mismos tareferos están presionando para ir a los yerbales. No se puede aguantar quince días sin nada, no nos olvidemos que venimos de un Gobierno durante el cual no llegábamos a fin de mes”, concluyó.
Medidas de prevención
Desde el INYM remarcaron que “es necesario seguir las recomendaciones que efectúan los organismos sanitarios y adoptar algunas de las medidas tomadas en otras cadenas productivas”.
Para el traslado del personal se recomienda que, en la medida de lo posible, cada tarefero realice su traslado en forma individual, por sus propios medios y evitando aglomeraciones. De no ser posible, el traslado de trabajadores debe ser realizado con transporte habilitado, debiendo respetarse en todos los casos, una distancia mínima recomendada por los organismos competentes. No compartir cabina de camión, cosechadora o tractor.
No se deberá compartir mate, tereré, utensilios para tomar agua. Debe haber disponibilidad de agua y cada trabajador usar vasos o botellas individuales.
En el momento de la cosecha, se aconseja no trabajar de a pares. Cada cosechador deberá tener su lineo o zona de cosecha. También deberán marcarse las ponchadas, tijeras y serruchos para que sean personales. Las herramientas deben lavarse por lo menos dos veces al día. Y los guantes, en caso que no sean descartables, deberán ser lavados o desinfectados.
En los secadores o playas de acopio, en tanto, es importante que el camionero se traslade solo sin acompañante. Evitar la congestión de personas en la báscula. La comunicación entre el personal del secadero y el camionero debe mantenerse al aire libre y respetando la distancia recomendada de 1,5 metros. Sólo deben estar en el lugar el personal mínimo indispensable para la actividad. Rociar las ponchadas con agua y lavandina, una vez descargadas.