
Las discusiones y los conflictos siempre están a la orden del día en la sociedad, pero tiempos difíciles como la actual cuarentena, con el impacto que genera la situación de aislamiento y la angustia ante la amenaza del coronavirus, suelen potenciarlos.
“Partamos de la base de que el conflicto es normal en las relaciones humanas y que sucede en la convivencia. Entonces, si esa convivencia se vuelve forzada, como ocurre en este contexto, esos conflictos se acentúan, teniendo en cuenta que a veces estamos en situaciones que hasta hace unos días no nos imaginábamos: no sólo estamos más tiempo en la casa, sino más tiempo con el vecino, sumado a la preocupación que hay no sólo por el coronavirus sino también por el dengue”, ratificó la abogada y mediadora Valeria Fiore.
Al respecto, la también directora general de Métodos Participativos de la Municipalidad de Posadas confirmó a la FM 89.3 Santa María de las Misiones que en los últimos días “hemos tenido varias consultas y denuncias respecto a cosas como que el vecino tiene el patio lleno de cacharros y junta mosquitos, que no corta los yuyos o el tema de la música a volumen alto”.
Fiore argumentó que “cuando ya estábamos pensando en robots y un montón de cosas, viene este virus y se para el mundo. Ahí es donde se replantean un montón de cuestiones que nos generan tanta incertidumbre y eso también influye en cómo estamos preparados para escuchar las quejas del vecino, para escuchar al marido y a los chicos en casa… En general estamos más susceptibles porque somos seres gregarios y sin embargo este virus nos obliga a estar unidos pero alejados para salvarnos, entonces hay veces que nos gustaría estar con otra persona o en otra situación y no podemos”.
Por eso, “siempre que abordamos estas situaciones tratamos primero de contextualizar, en el sentido de que la dicotomía entre cooperación y conflicto se da en todos los niveles: desde el individuo, en la familia, en el barrio, en la empresa, en la provincia, en la nación y en la sociedad global. Es cierto que a veces, cuando hay amenazas tan graves, la cooperación en los niveles más altos se hace más fuerte: hoy en día tenemos a toda la humanidad unida lidiando contra este coronavirus. Pero a veces, en los niveles más bajos, empiezan a surgir las rispideces”, advirtió.
En este marco, agregó, “hoy podemos ver que se empiezan a plantear cuestiones que la gente suele ver como blanco o negro, y ahí es donde me parece importante generar reflexión, en el sentido de poder relajar. A veces la paz está en los grises”.
Para ello aconsejó que “hablemos en términos de intereses: nos interesa la salud, nos interesa la economía, nos interesa la educación de los chicos, pero todo eso hay que poder coordinarlo y conversarlo. Aprendamos a conversar, porque hoy en día, en una casa, una familia tiene que lograr nuevos acuerdos. Porque antes la computadora quizás estaba ahí y nadie la usaba, pero ahora resulta que los chicos tienen clases por internet, los grandes tratamos de trabajar por internet, entonces tenemos que llegar a un acuerdo: cómo ocupamos la computadora, en qué horario, los espacios de silencio… Y todo esto lo vamos a llevar adelante con conversación”, ejemplificó.
“No puedo modificar al otro”
A la hora de afrontar situaciones de conflicto puntuales entre vecinos, la especialista en mediación sugirió la conversación como mejor herramienta.

También advirtió que “yo no puedo pensar en modificar al otro. En el imaginario está instalado esto de que el cambio es muy fácil para el otro, pero yo ni pienso en cambiar, y todos llegamos a un conflicto con esta idea: que hay una única solución, la mía. Entonces, primero hay que pensar en ser un poco más flexibles y más abiertos en la percepción que tenemos de las cosas, poder corrernos de esta mirada de que la realidad es como yo la veo y punto. Estar dispuesto a escuchar cómo es la visión de la otra persona en el conflicto”.
Según Fiore, esto se logra “preguntando: en vez de acercarme y decirle de todo a la vecina, le puedo preguntar qué es ese ruido que suena agudo en casa y me molesta. Empezar a hablar de percepciones y no de realidades”.
También recomendó “no tomar las cosas como personales, porque enseguida se personaliza y uno llega a pensar que te lo hace a propósito. Hay que partir del supuesto de que bajo cualquier comportamiento del otro siempre hay una intención positiva. Ver al otro desde esta mirada de que hace lo que puede con lo que tiene”, en especial en esta época de cuarentena en la que por ejemplo “ves a algunos por las redes sociales que están atacados por limpiar, contar lo que están haciendo, cantan, hacen gimnasia en familia… Y hay otros que quieren hacer fiaca, están más tranquilos y están bien”.
Por eso, aconsejó “en la medida en que uno pueda, aprovechar esta crisis como un punto de inflexión para conocerse, observarse y dar lugar a lo nuevo. Lo que yo puedo modificar es mi metro cuadrado, pero no puedo pretender modificar ni a mi vecino, ni al de la esquina, ni al kiosquero, ni a los que hacen la cola en la en la verdulería y no respetan la distancia. Sí tengo que ser consciente de mi metro cuadrado y de nutrir con lo mejor, no sólo lo material o mis reacciones, sino mi pensamiento, la energía en la que vibro”, sentenció.
Charlas para seguir desde casa
Desde la Dirección General de Métodos Participativos, Resolución de Conflictos y Fortalecimiento Ciudadano lanzaron un nuevo ciclo de charlas virtuales en vivo, en el marco del espacio de reflexión llamado “Diálogos en Comunidad, desde casa”.
Durante esta semana se tratarán diferentes temas, elegidos en base a las problemáticas e intereses planteados por la comunidad y acompañados por profesionales que ayudarán a transitar este proceso de aislamiento de una manera cuidada.
Así, mañana a las 10:30, la licenciada Corina Dousset Urquiza hablará sobre la cuarentena y el consumo problemático de sustancias. El miércoles a la misma hora, la licenciada Silvana Domínguez abordará desde la psicología los aspectos más duros de esta etapa de aislamiento obligatorio. En tanto que el jueves, el sacerdote Juan Rajimon reflexionará sobre cómo vivir la espiritualidad desde nuestros hogares.
Para acceder a las charlas “en vivo” se deberá ingresar al Instragram de la directora general de Métodos Participativos, @valeria_fiore_caceres. Igualmente, los encuentros serán grabados y se podrá acceder a ellos en cualquier momento desde las redes sociales de la Dirección: Mediación Posadas en Facebook y @direcciondemediacion en Instagram.