
La mujer que semanas atrás fue detenida acusada de delitos en la modalidad “viuda negra”, sigue detenida en Jardín América a la espera de resoluciones judiciales. En principio, se aguarda que sus víctimas pueden ser trasladadas a la sede del Juzgado de Instrucción 2 de esta localidad para la declaración testimonial. Si se logran salvar los inconvenientes obligados por la pandemia del coronavirus, esta semana se podrían tener más detalles del caso.
La acusada también es investigada por falsa denuncia en un caso de supuesto abuso sexual, además de iniciársele una investigación federal por supresión de identidad y por si fuera poco, haber huido tras una salida transitoria de una cárcel bonaerense en 2015. Son muchas las explicaciones que tiene que dar la sospechosa ante la Justicia. Uno de esos delitos es investigado por el magistrado Roberto Sena, quien instruye la causa por denuncias de robos y hurtos ocurridos en Puerto Leoni y Jardín América. La punta del ovillo que permitió desentramar la madeja de hechos reñidos con la ley, comenzó luego que ella misma denunciara que había sido abusada por un padre y su hijo, dueños de un albergue en San Vicente, tras quedar varada por la cuarentena. Había informado a la Policía que como se había quedado sin dinero para pagar por la habitación, durante siete días la habían privado de su libertad y abusado de ella, hasta que logró escapar.
El caso tomó trascendencia pública, personas que ni siquiera la conocían le dieron asilo y contención. Todo esto ocurrió a fines de marzo. Como supuestamente había sido víctima de abuso, comenzó a recibir atención psicológica en Posadas. Quien la cuidaba, había sospechado que la mujer le había sustraído la suma de 5 mil pesos y hasta temió por su integridad cuando tras tomar un mate preparado por la supuesta víctima, de golpe sufrió una fuerte somnoliencia que la atemorizó y la hizo pedir ayuda.
Cuando la Policía llegó a dialogar con la mujer para conocer su estado tras el supuesto abuso, se enteraron de las irregularidades que denunció su cuidadora. Las sospechas comenzaron. Revisaron su habitación y vieron una valija roja. De inmediato lo vincularon con una denuncia de robo que había ocurrido en Jardín América. En ese caso la víctima había sido una mujer de edad avanzada y su nieta discapacitada de 18 años. La abuela había relatado que la mujer a la que habían dado asilo luego que con artimañas se hiciera pasar por una persona necesitada de ayuda, había golpeado a la joven para que le dijera dónde guardaban la plata. Cuando se fue de la vivienda se llevó justamente una valija roja con el detalle de una ruedita reparada. En ese punto la Policía avanzó en la investigación y a través de la toma de huellas dactilares supieron que no era quien decía ser. Era una prófuga del sistema penitenciario bonaerense y tenía pedido de captura de Interpol. En pocos días se reveló que la mujer había robado y radicado una presunta denuncia falsa por abuso, para presumiblemente no pagar el albergue. Todo se encuentra en etapa de investigación y esto podrá ser acreditado cuando sus víctimas puedan presentarse a declarar ante la Justicia.
Múltiples causas
Es investigada en San Vicente por falsa denuncia tras supuesto abuso. En Jardín América por robos y hurtos. Además, estaba prófuga del servicio penitenciario bonaerense y tiene una causa por falsa identidad.