Uruguay comenzó a abandonar de a poco de la cuarentena y a reactivar diferentes sectores de su economía, pero sin dejar de lado las precauciones para evitar nuevos brotes de coronavirus. Si bien el presidente Luis Lacalle Pou no había dictado un aislamiento obligatorio como en la Argentina, el Ministerio de Salud exhortó a la población a permanecer en sus hogares.
“Si encontraban una multitud en las playas o paseos, la Policía los obligaba a dispersarse. Aún no pueden abrir los cines y teatros, pero permiten que abran los restaurantes, con un máximo de dos personas por mesa”, explicó a Cadena 3 el periodista uruguayo Martín Clavijo.
El reporte, además, precisó que respetan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud con el uso de tapabocas y que los locales ofrecen alcohol en gel.
Por otro lado, el Ministerio de Turismo de Uruguay comenzó este lunes a elaborar un protocolo con medidas de seguridad e higiene para avanzar en la reactivación de la actividad.
El protocolo comprenderá disposiciones de higiene y bioseguridad para hoteles y otro tipo de alojamientos y para la actividad gastronómica.
El turismo aporta el 8% del PBI de Uruguay y ocupa al 11% del total de los trabajadores registrados de ese país.
Uruguay es uno de los países de Sudamérica menos castigados por el coronavirus, con 652 casos confirmados, de los cuales 195 personas permanecían infectadas, diez de ellas internadas en terapia intensiva, 17 murieron y 440 se curaron.
Fuente: Noticias Argentinas