Se trata de la diócesis más grande de Misiones y tiene a su cargo 165 merenderos. En estos días de aislamiento obligatorio los chicos no tienen permiso para asistir por ello hay que duplicar -o triplicar- la cantidad de alimentos que se entregan: ya no es el vaso de leche reforzado que recibía personalmente cada niño sino la jarra u olla para toda la familia.
En toda la diócesis de Iguazú, los voluntarios atienden 165 merenderos donde antes de la cuarentena asistían 7.266 niños en situación de riesgo.
Los tres comenderos que funcionan en Iguazú (ese obispado tiene jurisdicción desde esa localidad hasta Capioví), cuentan, por ejemplo, con un sistema de merienda reforzada.
Se trata de un servicio que depende del área de Educación de Cáritas Nacional que incorpora a la merienda otros alimentos a base frutas y carnes “porque a veces esa merienda se transforma en la única comida que van a ingerir los niños antes de irse a dormir”, dijo Mirian Reyes integrante del equipo en esa diócesis y encargada del área de prensa.
La invitación de Periodistas Solidarios a la maratón benéfica fue la posibilidad de sumar contribuciones a la obra que realizan y no dudaron en aceptar el desafío.
Hubo que buscar supermercados para habilitar los carritos solidarios y en tiempo récord consiguieron el apoyo de 50 comerciantes y pequeños emprendedores. Sin embargo, la colecta todavía no tuvo el impacto esperado.
Miria indicó que “nuestra gente es muy solidaria y no dudamos de eso; sin embargo, se nota cómo el asilamiento planchó la actividad y, en general, las familias en si se encuentran en una situación complicada, más o menos por igual”.
Compromiso con la campaña
En Iguazú, como dato extra, también se está promoviendo un carrito solidario del Hogar de Día, cuya campaña había comenzado mucho antes. Los carritos se encuentran uno al lado del otro, pero en éstos por cada donación de alimento o artículo de limpieza se regala un jabón o un barbijo de fabricación propia.
No obstante, la voluntaria y su equipo se tomaron el trabajo de comprometer a los cajeros de los comercios adheridos (un total de 18 en la ciudad de las cataratas), brindaron charlas y capacitaciones para que sean partícipes en informar e invitar a la población a sumarse a la maratón.
Confían que hay tiempo, la campaña concluye el 10 de mayo; para tocar los corazones y que las manos se extiendan por doquier para llenar los carritos con las preciadas mercaderías.
Asimismo, existen otras formas de colaborar ya sea mediante la adquisición de obras de arte, donadas por artistas plásticos misioneros, o por medio de depósitos bancarios a la cuenta CBU 2850002730094060761501.