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Tras la desactivación del “hospital de campaña” de San Ignacio, que funcionaba en el polideportivo de esa localidad, el subsecretario de Salud, Héctor Antúnez Proeza, aseguró que hay en la actualidad solo un espacio habilitado para recibir a pacientes COVID-19 en aislamiento fuera de los muros hospitalarios. Se trata del Santuario Santa María del Iguazú, en Puerto Iguazú, donde están dos pacientes en aislamiento.
“Lo que ocurrió en San Ignacio fue una mala interpretación del equipo de salud local. Vale recordar que, fuera de los muros hospitalarios, se montaron 2.400 camas para pacientes leves con coronavirus en distintas instalaciones, entre ellas el polideportivo local. Pero la idea nunca fue montar en estos espacios estructuras paralelas hospitalarias, con guardias incluidas. Por eso, no estamos cerrando este centro de derivación para los pacientes leves que, a futuro, necesiten cumplir el aislamiento; pero sí desactivamos la atención de las guardias”, explicó Antúnez Proeza.
Plan operativo
Según indicó el funcionario, “iremos habilitando estos espacios para aislamiento de los pacientes a medida que se necesite, pero por el momento sólo habilitamos el de Iguazú”.
De acuerdo al plan operativo de la provincia ente la pandemia, “tenemos hoy identificados más de 300 profesionales de salud que podemos contratar. Por ahora hemos contratado más de 60 médicos y en una segunda tanda tenemos enfermeros y técnicos. Todas estas acciones las haremos en la medida que epidemiológicamente sea necesario, hay que entender que hace dos meses, cuando todo esto comenzó, pensábamos que el contagio sería mucho más rápido en nuestro país y por eso, lo primero que hicimos fue aumentar las camas en los hospitales… lo cierto es que no dejamos de aprender sobre este virus y su comportamiento”.
Antúnez Proeza recordó que luego de incrementar las camas hospitalarias continuaron con la contratación del personal de salud. “Creo que el sistema de salud está preparado para absorber la atención de los pacientes con coronavirus con cuadros moderados a graves”, aseguró.
Criterios para la externación
En tanto, recordó que en el centro de aislamiento habilitado en Iguazú está el joven de 27 años, el segundo positivo diagnosticado en Misiones, “que sigue dando positivo, aunque con muy poca carga viral, por lo que no puede volver a su casa para evitar riesgo de contagio a su familia”.
También está en el santuario la nena de 4 años (el caso positivo 9). Respecto a la externación, el subsecretario de Salud señaló que se tiene en cuenta el estado clínico del paciente pero también las condiciones habitacionales, “porque un paciente que debe aislarse requiere una habitación y baño propios, además de un acceso individual a esos espacios para que no se cruce con otros integrantes de su familia”.
En este contexto, explicó que estos lugares de aislamiento están previstos para los pacientes que no tienen estas condiciones en sus viviendas para poder cumplir allí este proceso, “entonces se trasladarán a estos espacios donde no está previsto la atención médica, pero sí enfermeras, agentes sanitarios y voluntarios”.
Vale recordar que Misiones, en estos poco más de 50 días de cuarentena, amplió su estructura hospitalaria a 290 camas críticas y 4.900 camas en hospitales. Además, suman 2.400 las camas extrahospitalarias.
“No podemos tener internados pacientes que no lo necesitan”
Consultado sobre porqué de un día para otro se comenzó a aplicar la política de externación para los pacientes positivos de COVID-19 que, hasta hace una semana, debían permanecer en el hospital hasta dar dos veces negativos, Antúnez Proeza indicó que con los primeros pacientes el equipo profesional necesitaba familiarizarse con la patología, “para ver que el paciente con formas leves puede ser controlado sin inconvenientes aunque esté externalizado. Hoy no se justifica que un paciente con COVID-19 con síntomas leves o asintomático esté internado en un hospital, porque no lo necesita”.
En cuanto a la disminución de los testeos realizados la última semana, el funcionario destacó que se debe a que se está estudiando solo a las personas con síntomas sospechosos, “eso no quiere decir que, ahora que volvieron a ingresar bastantes personas a Misiones, no volvamos a hacer hisopados a los asintomáticos. Por eso, estamos atentos a lo que sucederá en los próximos días tras la apertura de la actividad en algunos sectores de la economía”.
Personal de salud lamentó desactivación
Por disposición del Ministerio de Salud Pública, el servicio montado en el polideportivo municipal de San Ignacio para atender pacientes respiratorios quedó inactivo desde este jueves.
La comunidad recibió con mucha decepción esta decisión, especialmente el equipo de salud que se capacitó y se entrenó para estar preparados para atender a los pacientes con COVID-19.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, una de las enfermeras del hospital de San Ignacio contó que “en el tinglado estábamos no solo los médicos, enfermeros del hospital, sino también mucha gente que estaba colaborando ad honorem.
Si bien durante este tiempo no atendimos pacientes positivos, sí recibimos pacientes con síntomas sospechosos. Cuando visitaron nuestras instalaciones, los funcionarios de Salud Pública nos felicitaron por el entusiasmo pero ahora, de un día para otro, nos dicen que no tienen presupuesto para que sigamos funcionando en este lugar mientras no tengamos casos positivos de coronavirus en San Ignacio”, lamentó.
“Entiendo la decisión”
El personal de salud de San Ignacio incluso cumplía guardias en el polideportivo que durante todo este tiempo funcionó como una sala de respiratorios, de hecho ahí se atendían a los pacientes febriles y afecciones respiratorios.
“Todos los elementos que necesitamos para el hospital de campaña, incluido los sueros e insumos en general, los conseguimos a través de donaciones de los vecinos. Estamos muy agradecidos con la Municipalidad, Fuerzas de Seguridad, Bomberos, costureras, mujeres solidarias, EPET 12 y el pueblo en general”, señalaron.
Tras la orden del Ministerio, muchos equipos (como los tubos de oxígenos) fueron llevados nuevamente al hospital aunque, según confirmó el intendente Javier Peralta a PRIMERA EDICIÓN, “las camas quedarán montadas en el polideportivo en caso que se necesite más adelante usar este espacio para albergar pacientes. Todo lo que la Municipalidad puso o consiguió seguirá como está. Lo que se dejará de hacer son las guardias médicas, pues nosotros fuimos un paso más allá, no sólo teníamos un tinglado con 20 camas”.
Peralta confirmó que el motivo del cierre que le dieron es el uso racional de los recursos, “la cuestión económica pesa y no tenemos ningún internado por COVID-19; pero el compromiso del Gobierno es poner todos los recursos necesarios cuando sea necesario”.
Peralta manifestó su comprensión con la decisión de Salud Pública, “la cuestión económica nos afecta muy fuerte. Además, no es descabellada la decisión, están cerrando un hospital de campaña que no tiene ningún internado y San Ignacio tiene su hospital”.