En medio de las presiones cambiarias, una señal de alerta sonó en el Banco Central tras detectar que en el bimestre abril-mayo, en plena pandemia de coronavirus, se pagaron importaciones un 30% por encima del volumen realmente traído del exterior.
Según los datos a los que accedió la agencia NA, en ese período se importó por unos 5.800 millones de dólares.
Pero los importadores accedieron a divisas por 7.500 millones de dólares.
“Ese comportamiento fue disruptivo respecto del historial de acceso al mercado de cambios“, dijo a NA una fuente de primera línea de la autoridad monetaria.
Pero el BCRA también dejó trascender que está dispuesto a estudiar modificaciones a las últimas restricciones impuestas en el acceso al mercado cambiario, si nota que traban las importaciones.
Históricamente, existe una correlación entre el volumen de importaciones y el acceso al mercado.
Incluso, por las prácticas comerciales habituales, hay menores pagos que volumen de importación, constituyendo la diferencia las obligaciones comerciales normales.
En este bimestre hubo cancelación de obligaciones y anticipo de pagos de importaciones que no hacen a las prácticas comerciales habituales, según los expertos del BCRA, lo cual significa que hay sospechas de especulaciones irregulares en el mercado cambiario.
Una circular emitida por la autoridad monetaria, la A7030, establece las condiciones de acceso al mercado para normalizar esa “situación disruptiva”.
El equipo liderado por Miguel Pesce sostiene que esa circular no significa un “impedimento para importar ni alteración en el régimen de importaciones del país”.
Y aseguran que están las divisas disponibles para el normal funcionamiento de la actividad productiva.
No está en el espíritu de la norma alterar el volumen de importaciones, sino establecer un sendero de pagos acorde con las buenas prácticas comerciales, indican desde el BCRA.
Y adelantan que estudiarán “perfeccionamientos” de la norma si en el transcurso de las operaciones el sector productivo detecta inconvenientes que no responden al propósito.
Por las dudas, Pesce hizo circular un mensaje claro entre los hombres de negocios: “No hay impedimento para importar ni alteración alguna en el régimen de importaciones del país, y las divisas siguen disponibles para el normal funcionamiento de la actividad productiva en el país”.
Fuente: NA