El tiro con arco también volvió: Posadas dio el puntapié inicial el domingo y el lunes lo siguió la gente de Alem. Luego de casi tres meses de parate, los arqueros volvieron a encontrarse bajo estrictos protocolos sanitarios en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia de coronavirus.
En Posadas, la escuela de iniciación de tiro con arco del CAPRI arrancó el domingo. El día soleado ayudó a la vuelta y se presentaron diez arqueros, de una nómina de 28 inscriptos, entre los que se encuentran varios federados.
“Los horarios son jueves a las 16 y domingo a las 10. Por el momento se está haciendo cargo Rafael Larraburu, hasta que Juan Carlos ‘Talo’ Giménez pueda volver”, explicó a EL DEPORTIVO el secretario de la Asociación Misionera de Tiro con Arco (AMiTA), Marcelo Szylosdki. Giménez es parte de los grupos de riesgo, por lo tanto no quieren precipitarse con su regreso.
Por su parte Alem volvió ayer lunes. En el club Germano Argentino se organizaron turnos de 50 minutos, desde las 17 hasta las 20, tal como lo estipula el protocolo sanitario. “Entre turno y turno se higienizaron los elementos. Hasta ahora tenemos inscriptos 12 chicos, cinco de ellos tienen entre 10 y 12 años, y el resto son adultos”, indicó Szylosdki.
Otro de los que tiene luz verde es Aristóbulo del Valle, pero el Centro Cultural Doctor Aristóbulo del Valle (CeCAV) todavía no pudo comenzar con las actividades puesto que el profe y presidente de AMiTA, Vasco Baigorri, no puede retomar las clases por cuestiones personales.
“La tenemos a Jessica Gunther, que también es profe de educación física, y calculamos que ella se va a hacer cargo del grupo hasta que el Vasco pueda volver a dar clases”, confío Szylosdki a EL DEPOR.
De esta manera, los arqueros van volviendo de a poco pero con mucho entusiasmo luego de casi tres meses sin prácticas presenciales por la pandemia de coronavirus.